Aunque la orientación escolar es una responsabilidad compartida tanto por los padres y profesores o tutores, como por el orientador del centro, la labor de esta última figura es fundamental para que la orientación sea efectiva. En estos momentos la orientación no esta dirigida como antes a corregir problemas puntuales de alumnos concretos, sino que, además de estar generalizada para toda la comunidad educativa, actúa de manera preventiva, estimulando el desarrollo de capacidades en el alumno que le ayuden a resolver los problemas de su vida académica.
El psicólogo Jesús Sánchez Felipe nos acerca en esta entrevista al perfil del orientador escolar. Con más de 30 años de experiencia docente y 18 años como orientador en un Instituto de Educación Secundaria, Sánchez Felipe preside actualmente la Asociación Profesional de Orientadores en Castilla la Mancha (APOCLAM), desde donde los orientadores de esta comunidad comparten experiencias y materiales, impulsan iniciativas y tratan, en la medida de lo posible, de unificar sus actuaciones en los centros.
Las funciones de la orientación en el sistema educativo tienen un valor fundamental en la actualidad. Hay que tener en cuenta que la orientación propicia una función de asesoramiento a toda la comunidad educativa, incluidos padres, profesores y alumnos.
En todos. Cada edad del alumno requiere de atenciones diferenciadas conforme a sus características evolutivas y su madurez personal.
Ambas funciones son importantes, pero más que estas, la principal función del orientador es asesorar. La detección del problema la hacen los padres y los tutores, y el orientador colabora en su solución.
Semanalmente se celebran reuniones de coordinación donde se analiza la marcha de la clase
Sí, semanalmente se celebran reuniones de coordinación por niveles educativos donde se analiza la marcha de la clase y de inmediato, si fuera necesario, se establecen los planes de actuación y se habilitan los recursos precisos para la solución de los problemas, que por fortuna son más de aprendizaje que de disciplina. La toma de decisiones final, si de un grupo se tratara, se hace a través de una Junta de Aula, reunión que acoge a los profesores del grupo, coordinados por el tutor.
Nuestro sistema educativo oferta otras muchas alternativas a los alumnos que desean abandonar la Enseñanza Secundaria Obligatoria, por ejemplo, los Programas de Diversificación Curricular, los Programas de Cualificación Profesional Inicial o las ofertas de formación como las Escuelas-Taller. Ante esto, la labor orientadora cobra especial importancia, sobre todo con los padres, puesto que en ocasiones desconocen la existencia de estas alternativas y no son capaces de tomar una decisión adecuada. Por otra parte, antes de que se produzca el mencionado abandono escolar el orientador deberá estar atento, con la ayuda de profesores y tutores, a que por inadecuadas aplicaciones de estrategias de aprendizaje, planificación o problemas familiares el alumno pierda niveles de competencia curricular, se retrase o llegue ese fatídico momento de optar por el abandono.
Los programas de Orientación Académica y Profesional ayudan a los alumnos elegir los itinerarios académicos correctos
El Plan de Acción Tutorial y el Programa de Orientación Académica y Profesional cuyo desarrollo se hace en colaboración con tutores y profesores del grupo deben ser preventivos en este sentido. El primero, para fomentar buenos hábitos de estudio y enseñar a los alumnos a aprender a aprender. El segundo para ayudarle a elegir los itinerarios académicos correctos que le lleven con fundamentos y con garantías de éxito a la universidad. En este sentido, APOCLAM ha iniciado un trabajo de colaboración con La Universidad de Castilla La Mancha para que la Orientación sea continua desde Primaria hasta la Universidad. Consideramos que será una experiencia muy positiva para nuestros futuros universitarios.
En el asesoramiento. Se dan múltiples variables por las que los padres acuden al Departamento de Orientación, por motivos académicos, de disciplina, de absentismo o de integración, por poner algunos ejemplos. Aun así, creemos que las Asociaciones de Padres y Madres escolares deberían colaborar más en fomentar esta relación para posibilitar un mayor intercambio de información y formación y potenciar auténticas escuelas de padres.
En Infantil y Primaria funciona lo que se conoce como Unidad de Orientación, integrada por el orientador, el profesor técnico de Servicios a la comunidad, el profesor de Audición y Lenguaje, el profesor de Pedagogía Terapéutica y otros especialistas, según las necesidades del alumnado. En Secundaria es el Departamento de Orientación, integrado además de por el profesorado anteriormente mencionado, por profesores especialistas de los Programas de Diversificación, de Cualificación Profesional Inicial, de Inmersión Lingüística, etc.
Los centros tienen generalmente un solo orientador, una cifra insuficiente
En general nada más que uno. Una cifra insuficiente, teniendo en cuenta las demandas de orientación que se producen, cada vez más variadas, y el elevado número de alumnos que integran un centro educativo.
Siempre. Facilitan el trabajo colaborativo y el intercambio permanente de información entre los profesionales. Asimismo, en la Asociación es nuestra herramienta más potente, con ella realizamos un trabajo de formación con nuestros asociados, de aporte de materiales y de colaboración e intercambio con nuestra Consejería de Educación, con los Centros de Profesores, con la Universidad de Castilla La Mancha y otros organismos.
La participación de los alumnos con el orientador es de elevado interés
El alumnado percibe al orientador como la persona facilitadora de recursos paliativos, la que le ayuda en los procesos de toma de decisiones y de apoyo y asesoramiento permanente, por lo que su participación en el desarrollo de los programas es de elevado interés.