La Agencia Espacial Europea (ESA) ha detectado por infrarrojos, a través del observatorio espacial Herschel, un «furioso» viento de gas molecular que se aleja a gran velocidad de nuestra galaxia y que podría frenar en seco la formación de nuevas estrellas, ya que se originan a partir de este gas.
Los vientos detectados son «extraordinariamente rápidos», indica la agencia, que señala en concreto que la mayor velocidad registrada es de 1.000 kilómetros por segundo, lo que supone una cifra 10.000 veces superior a la de los huracanes que se producen en la Tierra.
La ESA destaca que es la primera vez que se observa «de manera inequívoca» una corriente de gas de estas características en la Vía Láctea y, además, señala que es «un descubrimiento importante porque la formación de estrellas parte del gas molecular, y estas huidas roban a la galaxia la materia prima que necesita para hacer nuevas estrellas». «Si las corrientes son lo suficientemente poderosas, incluso podrían detener la formación de estrellas completamente», apunta el autor principal del trabajo, Eckhard Sturm, científico del Max-Planck-Institut für extraterrestrische Physik.
Este hallazgo permitirá estudiar qué significan estos flujos en la evolución galáctica y sus características, aseguró Sturm. A este respecto, el investigador explicó que estos vientos pueden generarse por la «intensa emisión de luz y partículas de las estrellas jóvenes» o por «ondas de choque de la explosión de estrellas viejas». Tampoco descartó que sean consecuencia de la radiación emitida en la materia que se arremolina alrededor de un agujero negro en el centro de la galaxia ya que, según Sturm, los vientos más rápidos «parecen venir de las galaxias que contienen núcleos activos de galaxias más brillantes, en los que un agujero negro gigante se alimenta de su entorno».
El equipo de Sturm probará ahora esta idea con otras galaxias en su muestra. El científico explicó que espera que los resultados de estas nuevas pruebas puedan ser un avance para explicar cómo se forman algunas galaxias elípticas.