El departamento de Interior de la Generalitat de Cataluña propondrá que las escuelas impartan una asignatura evaluable de educación vial, destinada a inculcar prudencia a los futuros conductores, y ha anunciado que colaborará con la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en la creación de una cátedra sobre esta materia.
La incorporación de la educación viaria como asignatura obligatoria es un proyecto «a medio o largo plazo» que se estudia en colaboración con el departamento de Enseñanza para concretar el modo en que se introducirá en los programas escolares, señaló la responsable de Interior de la Generalitat, Montserrat Tura.
La consejera explicó que es necesario analizar la incorporación de esta asignatura dentro del área de sociales o si se precisará una modificación de la ley para introducir la educación viaria como una materia evaluable y obligatoria en los currículos, tanto de primaria como de secundaria.
En opinión de Tura, este tipo de formación «es imprescindible, teniendo en cuenta la cantidad de gente joven que se incorpora a las carreteras», y responde al interés del departamento de Interior por «intensificar la preocupación y la sensibilidad» de la sociedad ante los accidentes de tráfico.
Por su parte, el director del Servicio Catalán de Tráfico (SCT), Rafael Olmos, destacó que el objetivo es que la educación viaria, asignatura que podría llamarse también de convivencia social o movilidad segura, «se convierta en una materia evaluable en las escuelas».
