Los actuales diplomados universitarios (carreras de tres años) podrán equipararse, a efectos profesionales, a los futuros graduados, una vez que culmine la reforma universitaria que armonice las titulaciones españolas con las del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Será gracias al reconocimiento de la experiencia profesional «como un elemento de valor añadido», señaló el director general de Universidades, Javier Vidal, durante un encuentro con periodistas en el que explicó la reforma de la Educación Superior.
Vidal anticipó la inminente creación de un grupo de trabajo que estudie las formulas y trámites de la equiparación, que será a efectos «profesionales», ya que no se otorgará automáticamente el nivel de Grado por una universidad a los actuales diplomados. En el grupo habrá representación de los ministerios de Educación y Ciencia, Trabajo y Sanidad, además de sindicatos y asociaciones profesionales y empresariales.
Experiencia profesional
Este grupo de expertos estudiará en el primer semestre de este año los mecanismos necesarios y el marco de cualificaciones para que quienes en la actualidad tengan el nivel de diplomado puedan acceder al reconocimiento profesional equivalente al de graduado. Para ello se perseguirá que, además del expediente académico, la experiencia profesional se reconozca como cualificación.
También se garantizarán, «intactos, los derechos y capacidades de los actuales diplomados y licenciados para acceder a los puestos de trabajo» tras la conclusión del proceso de Bolonia, que es como se conoce la adaptación del sistema educativo al EEES, del que participan 45 países.
Vidal aseguró que la Administración central y las comunidades autónomas han invertido ya en torno a 67 millones de euros en este proceso de armonización y reforma, que comenzará a impartir los primeros cursos de Grado en el curso 2008/2009.
Título de Grado
El título de Grado se obtendrá en cuatro años, tendrá base común y acabará con las actuales licenciaturas y diplomaturas. El Grado exigirá 240 créditos ECTS (el nuevo crédito europeo) y todos los primeros ciclos tendrán materias comunes y el mismo valor. Será posible concluir el Grado Universitario a los 22 años y lograrlo facilitará el acceso al mercado de trabajo.
Todos los títulos de Grado se organizarán en cinco grandes ramas del conocimiento: Artes y Humanidades, Ciencias, Ciencias de la Salud, Ciencias Sociales y Jurídicas e Ingeniería y Arquitectura. Dentro de cada una de estas ramas, las propias universidades diseñarán sus titulaciones ateniéndose a unas directrices generales.
Los másteres serán oficiales
El paso del licenciado al graduado es la clave de la armonización de unas universidades que formarán graduados, másteres y doctores a partir del 2008.
La movilidad de estudiantes y profesores y su formación permanente son también objetivos clave de la reforma.
La reforma universitaria pretende que la experiencia profesional sea reconocida como cualificación
El segundo ciclo es el de Máster y supone que, por primera vez, todos los másteres serán oficiales. Ofrecerá formación de alto nivel y especialización y exigirá entre 60 y 120 créditos. Es un ciclo de formación especializada en áreas concretas e interdisciplinares que concluirá con la elaboración y defensa oral pública de un proyecto de trabajo o fin de máster.
El de Doctor será el tercer ciclo y tendrá contenido muy abiertos y especializados. Contempla dos fases: de formación y de investigación. Podrán acceder quienes hayan obtenido el título de Grado Universitario, mientras que quienes dispongan de un Máster podrá acceder directamente a la fase de investigación.