Conseguir un buen clima de convivencia escolar no se limita a resolver los conflictos entre estudiantes. Este concepto engloba también las relaciones entre profesorado y alumnado, entre profesores, con el equipo directivo y entre las familias y escuelas. ¿Es posible armonizar las interacciones entre todos los miembros de la comunidad educativa? Diferentes organismos públicos e instituciones independientes ponen su empeño en ello. Elaboran para los interesados una amplia colección de materiales, recursos, estrategias y propuestas con el fin de lograr este objetivo.
El bullying o el acoso entre alumnos es una de las situaciones disruptivas de un centro educativo que llama más la atención entre la opinión pública. Sin embargo, desde una perspectiva integral de la convivencia escolar, hay que considerar las relaciones entre todos los integrantes de la comunidad educativa: alumnos, profesores, dirección y familias. De estas interacciones se derivan los diferentes problemas o situaciones que pueden alterar el clima de convivencia en el entorno académico y aumentan el riesgo de violencia o malestar en las aulas.
En los últimos años, las escuelas han implantado medidas para mejorar la convivencia
En los últimos años, las escuelas han implantado medidas para mejorar la convivencia. Así lo concluye el «Estudio estatal sobre la convivencia escolar en la Educación Secundaria Obligatoria», publicado por el Observatorio Estatal de la convivencia escolar del Ministerio de Educación. El objetivo de este informe, en el que han colaborado las 17 comunidades autónomas y han participado más de 40.000 miembros de la comunidad educativa (profesores, alumnos, familias y equipos directivos), es obtener un diagnóstico global de la situación actual de la convivencia escolar en nuestro país para conocer qué aspectos están bien y en cuáles hay que mejorar.
Obstáculos a la convivencia
Aunque los resultados de este estudio permiten afirmar que la convivencia escolar en general es buena -así lo valoran los participantes-, entre sus conclusiones se recalca que es preciso «incrementar, extender y evaluar las medidas adoptadas por los centros». De este modo, se pueden generalizar las buenas prácticas y encontrar soluciones a los principales obstáculos a la convivencia.
Las familias resaltan los riegos derivados de la alta exposición de los alumnos a las nuevas tecnologías
Según el informe estatal, desde el punto de vista del profesorado y los equipos directivos, las principales trabas que impiden un buen clima escolar son la falta de disciplina, la ineficacia educativa de las sanciones empleadas para corregir las transgresiones y la falta de implicación de las familias. Desde la perspectiva de las familias se resaltan, sin embargo, los riegos derivados de la alta exposición de los alumnos a las nuevas tecnologías sin supervisión adulta. Esto exige una mayor responsabilidad de los progenitores hacia sus hijos y el fomento desde la escuela de habilidades para una utilización crítica y adecuada de estos nuevos medios.
Materiales de apoyo
Las comunidades autónomas en sus respectivos ámbitos de gestión han fortalecido con distintas actuaciones la labor de los centros educativos en la búsqueda de un nivel adecuado de convivencia escolar. En la mayoría de los casos, se han creado servicios de atención específicos para este fin. Entre ellos destacan las líneas de apoyo al acoso escolar.
Materiales y recursos son de gran utilidad al implementar estrategias para la convivencia
Estos organismos, junto con otras asociaciones o instituciones de carácter no gubernamental, ponen a disposición de la comunidad educativa diferentes materiales y recursos de gran utilidad para implementar o desarrollar estrategias a favor de la convivencia en los centros. Algunas de las iniciativas más destacadas son las siguientes: