España participará este año con quince innovaciones científicas en la 32 edición del Salón Internacional de Invenciones de Ginebra, que se celebrará entre el 31 de marzo y el 4 de abril. En esta muestra, considerada la más importante del mundo por el número de transacciones comerciales, que superan los 30 millones de euros, se exhibirán más de un millar de innovaciones, que serán examinadas por un jurado internacional para conceder las medallas de oro y plata. Además, se concederán los premios Fundación García-Cabrerizo a la invención española y el que otorga la Oficina de Patentes y Marcas de España.
Entre los inventos españoles que se exhibirán en Ginebra figuran un motor propulsor de nave espacial, de Jesús Arteaga Díaz; un sistema vertical desplazable que facilita la restauración de fachadas, de Alejandro Baldero Ferrandiz; un sistema que filtra, evacua, transporta y depura aguas residuales, de Pablo Gumucio, y un ataúd ecológico para cremaciones, de Miguel Ángel López Borderías, entre otras invenciones.
Pedro García-Cabrerizo, asesor jurídico de la delegación oficial española, explica que el Salón de Ginebra está organizado, desde su inicio, para relacionar al inventor con las firmas, industrias y capitalistas que pueden interesarse por su comercialización. Aproximadamente la mitad de las novedades que se presentan cada año en la muestra son objeto de contratos comerciales.