Los juegos y juguetes educativos son muy valorados por los padres. Además de facilitar la diversión, desarrollan la capacidad intelectual de los niños y sus habilidades sociales. Pero, ¿qué es un juguete didáctico? ¿Cómo distinguirlo? A continuación se aportan pistas para elegir un regalo educativo y diversas propuestas para acertar en la elección estas Navidades. Entre otras, es imprescindible tener en cuenta la edad del pequeño a quien se entregará el regalo y sus gustos. Además, los progenitores deben conocer el funcionamiento del juguete y sus posibilidades para ayudar a su hijo a sacarle el máximo partido.
Qué es un juguete didáctico
Los juguetes didácticos facilitan un aprendizaje que refuerza la confianza y el autoconcepto positivo
Los juegos educativos son divertidos. Aunque a menudo se relacionan con actividades pesadas o aburridas, estos combinan aprendizaje y diversión para todas las edades. En su tesis «El juguete didáctico: una herramienta para su evaluación», Juan José Albaladejo Nicolás señala que son «juguetes que sirven para jugar, para entretener y divertir al niño». Apunta que tienen «un objetivo o varios de aprendizaje», ya sea por ensayo y error, observación o interacción, entre otros, y que estos aprendizajes inciden en el desarrollo de habilidades sociales, la capacidad intelectual y las aptitudes. Junto con lo anterior, según este experto, los juguetes didácticos refuerzan la confianza y el autoconcepto positivo.
No extraña, por lo tanto, que los juguetes didácticos estén entre los preferidos de los padres. Los juegos ayudan a los menores a aprender de manera lúdica, con ellos mejoran su expresión y desarrollan habilidades. Desde muy pequeños, los niños tienen la oportunidad de aprender de manera natural y alcanzar una situación de bienestar que les facilita el juego. Estos contribuyen al aprendizaje de conceptos y a establecer relaciones con otros iguales.
Cómo elegir un juguete educativo
La psicóloga María Jesús Díaz Aguilar y la pediatra Alfonsa Lora Espinosa señalan que los juegos cobran relevancia como medio para el desarrollo evolutivo general de los pequeños, ya que «a través de ellos los niños piensan, planifican y premeditan qué va a ocurrir con sus usos». Ambas advierten de que los juguetes ayudan a desarrollar el pensamiento de los pequeños, les enseñan los colores y tamaños, a comparar y establecer relaciones, incluso a asumir papeles figurados, por lo que recuerdan la importancia de acertar con la elección.
El portal Solohijos.com ha elaborado una lista de consejos para regalar con criterio en Navidad. Entre otros, recomienda comprar de acuerdo a los principios educativos. Asegura que no hay por qué adquirir en Navidad ese regalo que los niños piden «año tras año», puesto que solo se les debe complacer «si es posible y bueno para ellos». Insiste en que los hijos «no se traumatizarán» por ello, puesto que lo que piden «no siempre es lo que más les conviene».
En cuanto a los juguetes educativos, en el momento de elegirlos, se debe tener en cuenta:
- La edad del niño a quien se regale.
- El tipo de actividad que se quiere que practique.
- Si el menor tiene alguna discapacidad, ya sea visual, auditiva o motora.
- Otras circunstancias como sus habilidades, dominio del lenguaje o coordinación.
Propuestas para todas las edades
Elegir el regalo didáctico adecuado requiere tiempo. Sin embargo, en el momento de escoger el juguete educativo más adecuado según la edad, es conveniente tener en cuenta las siguientes recomendaciones a la luz de los consejos de distintos especialistas:
- Hasta 3 años: los juegos están pensados para utilizar los sentidos, trabajar la memoria, la lógica, el lenguaje, la atención y la creatividad, así como el movimiento, la coordinación y el equilibrio. Son adecuados los juegos que requieren el movimiento de los niños, como los correpasillos o andadores, libros interactivos, balancines, proyectores, juguetes con sonidos, puzzles de pocas piezas, libros interactivos, mesas de aprendizaje, muñecos que reproducen sonidos, de tela o de de goma, móviles para la cuna y construcciones sencillas.
- Hasta 6 años: a lo anterior, los juegos suman el ingenio o la reproducción de roles. Se recomiendan los cuentos, juegos para aprender o repasar los números, juguetes que permitan reproducir escenas o imitar la vida adulta (escuela, hospital, supermercado, casa, etc.), juegos relacionados con el cuerpo humano, puzzles, instrumentos musicales, juegos de mesa sencillos.
Hasta 10 años: es momento de reforzar el aprendizaje con juegos de reglas, electrónicos, de estrategia, de memoria, manualidades, bicicletas, juegos musicales, libros, construcciones complejas, juegos de magia, para contar, realizar multiplicaciones y divisiones, así como juegos y juguetes para interaccionar con otros niños o adultos.
Más de 10 años: a partir de esta edad, el juego es útil para mejorar el lenguaje, aumentar la atención o desarrollar la imaginación, entre otras cuestiones. Son adecuados los juegos de reflexión, matemáticos y de vocabulario, como el Scrabble, deportivos, de habilidad, puzles de muchas piezas, libros, juegos multimedia, videojuegos, construcciones complejas, tabletas y juegos de anatomía.