¿Qué asignaturas optativas son mejores para cursar durante el primer año? ¿De qué tipo son los exámenes de este profesor? ¿Tendré tiempo para practicar algún deporte universitario en el primer curso? Seguro que si todos los estudiantes universitarios de nuevo ingreso tuvieran un hermano mayor en los cursos superiores de los estudios que van a comenzar, lo acribillarían a preguntas como éstas u otras destinadas a resolver el “millón” de dudas que se plantean al afrontar esta nueva etapa educativa. Nadie mejor que un alumno que haya pasado ya por la misma experiencia para asesorar y orientar al estudiante novato.
Imagen: Daniel Lobo
Aunque cada año miles de estudiantes comienzan sus estudios universitarios y acceden a estudios superiores, también las cifras tanto de abandono temprano de los estudios como de retraso en la carrera universitaria son cada vez mayores; esto es debido en gran parte al fracaso académico que experimentan un buen numero de estudiantes durante el primer año como universitarios. Y es que la transición a la universidad no es una etapa fácil para los estudiantes.
p>El inicio de los estudios universitarios es un momento crítico dentro del proceso educativo del alumno, que puede producir en algunos casos incluso estados de incertidumbre y ansiedad ante lo desconocido: se enfrenta a una institución diferente, un plan de estudio abierto en el que el estudiante tiene que ser autónomo para decidir cómo configurarlo, una nueva metodología en el proceso de enseñanza y aprendizaje, adopción de nuevas técnicas de trabajo y estudio y además, en muchas ocasiones, salida del entorno familiar. La capacidad del estudiante para asimilar todos estos cambios e integrarse adecuadamente en el sistema universitario puede resultar fundamental para su éxito académico en los años posteriores.
Los estudiantes, más que información, muchas veces lo que necesitan es asesoramiento y orientación
Para facilitar esta transición, una de las herramientas que la gran mayoría de universidades españoles pone a disposición de sus alumnos son los servicios de orientación al estudiante, unos servicios que ofrecen sobre todo aquella información académica e institucional que puede facilitar el proceso de integración del alumno en la universidad. Sin embargo, los estudiantes muchas veces, más que información, lo que necesitan es asesoramiento, una buena orientación que les ayude a tomar las mejores decisiones sobre su vida académica, y quién mejor para hacerlo que otro alumno que ya haya pasado por esa experiencia.
Por eso, en la última década muchas de las instituciones universitarias españolas han incorporado a sus servicios de orientación distintos programas de tutorización y asesoramiento destinados a alumnos de nuevo ingreso. En estos programas, alumnos de cursos superiores de los mismos estudios, ejercen la labor de tutor y orientador de los «novatos» durante todo el curso, de modo que, de su mano, el nuevo estudiante aproveche al máximo su estancia en la universidad y pueda hacer uso de todas las oportunidades de desarrollo que ésta le ofrece.
Los tutores pueden usar esta actividad como asignatura de libre configuración que le otorga créditos universitarios
Generalmente, estos tutores u orientadores de cursos superiores suelen ser voluntarios y deben reunir una serie de características, como ser buenos estudiantes y tener habilidades de organización y trabajo en equipo. Antes de comenzar su labor de tutoría, reciben una formación específica por parte del departamento universitario responsable del programa, de modo que todos ellos puedan seguir una misma metodología de trabajo y seguimiento de los alumnos a su cargo y que finalmente se pueda realizar una evaluación sobre la efectividad del programa de tutorización. Por otra parte, en algunos centros universitarios que adoptan estos programas, los tutores pueden usar esta actividad como asignatura de libre configuración que le otorga créditos universitarios en otros centros, como por ejemplo en la Universidad de Granada, donde los tutores pueden beneficiarse de algunos incentivos como bonos para libros y material académico o bonos para fotocopias, entre otros.
Una vez que da comienzo el curso académico, la relación entre alumnos de nuevo ingreso y sus tutores, que suelen tener entre tres y seis alumnos a su cargo, se organiza a través de reuniones y contactos periódicos, ya sean directamente o a través de medios electrónicos; no obstante, son los propios tutores, dependiendo de las carencias que observen en los estudiantes, o los alumnos, según las necesidades que se les presenten, los que establecen su propio ritmo de tutorización.
Con esta labor los alumnos veteranos ayudan a los nuevos estudiantes a que el tránsito de la escuela a la universidad sea lo más fácil posible, proporcionándoles e informándoles de las herramientas básicas para desenvolverse con éxito en el ámbito universitario. La orientación puede estar dirigida en tres sentidos: