Los ministros de la Agencia Espacial Europea (ESA) dieron ayer luz verde a la misión «ExoMars» para explorar la superficie de Marte, utilizando para ello un robot móvil que aterrizará en el planeta rojo en el año 2011. El ingenio buscará rastros de vida pasada y presente en la superficie marciana y determinará en varios puntos del planeta la composición geoquímica y la distribución del agua. Asimismo, tratará de mejorar los conocimientos sobre medio ambiente y geofísica y, antes de aterrizar, identificar posibles amenazas.
Esta misión prevé colocar un vehículo con ruedas de 240 kilos en la superficie de Marte para buscar la existencia de vida a dos metros por debajo de la superficie marciana. Sin embargo, «ExoMars» no traerá todavía muestras minerales a la Tierra para su análisis detallado. Este tipo de misión es, según la ESA, demasiado compleja para ser realizada por un solo país o por una sola agencia espacial. La NASA planea una misión similar en 2016.
Presupuesto
El director de la ESA, Jean-Jacques Dordain, anunció que los ministros aprobaron el presupuesto de la agencia para el periodo 2006-2008, es decir, 8.255 millones de euros, lo que incluye 120 millones adicionales para programas actualmente en marcha.
Dordain se mostró satisfecho con este presupuesto, que calificó de «fantástico», a pesar de los problemas presupuestarios de algunos Estados miembros. «Es el 95% del dinero que pedimos para poder seguir siendo competitivos en el sector espacial y poder lanzar nuevos programas», dijo el director de la ESA.
Los 17 países miembros de la Agencia y Canadá se comprometieron también a utilizar «tanto como sea posible» lanzaderas europeas para misiones nacionales. De este modo, contratarán los modelos europeos «Ariane 5» y «Vega», a pesar de que los cohetes de otros países sean más competitivos.