Encontrarse con un perro abandonado en la calle, que precisa un hogar, no es una situación extraña en España: solo en 2010 se abandonaron un total de 109.074 perros, según el estudio “Fundación Affinity sobre el abandono de animales de compañía”. A continuación, una guía básica para saber qué hacer en caso de localizar a un can desamparado en la calle y querer adoptarlo.
Primer encuentro con el perro: tener precaución
Un perro abandonado en la vía pública, en la cuneta de una carretera o en una estación de servicio necesita ayuda. Una opción tras encontrarlo en situación de desamparo es decidir adoptarlo: convertirse en su familia.
Para la etóloga veterinaria Rosana Álvarez Bueno, experta en comportamiento canino, lo primordial en un primer contacto con el animal abandonado es tener precaución. «No conocemos al perro, no sabemos los traumas que ha sufrido y, por lo tanto, no sabemos cómo va a reaccionar», señala. Una reacción brusca o inesperada para el perro puede provocar que se asuste. «En situaciones de estrés, el perro puede huir y ser atropellado por un coche, o incluso, mordernos si se siente amenazado», añade Álvarez Bueno.
Es frecuente que el animal que deambula solo por la calle esté asustado. Ademas, con probabilidad, tendrá hambre y se mostrará desconfiado, por lo que se han de extremar las precauciones.
Técnicas para capturar un perro de la calle
Ciertas técnicas son útiles para capturar a un perro abandonado sin lastimarlo, como echarle una manta
Apresar a un perro abandonado, asustado y que, incluso, haya podido sufrir malos tratos no es una tarea sencilla. Si es posible, conviene pedir ayuda a un experto en captura de perros: contactar con una asociación protectora o un veterinario que ayude a agarrar al can.
Ciertas técnicas son útiles para capturar a un perro asustado sin lastimarlo. Un método clásico consiste en echar una manta encima del perro, de forma que tape sus ojos. Si el animal no ve, se evita que pueda sentirse amenazado, por lo que permanecerá más tranquilo.
«Otro método es anudar un lazo en una cuerda e intentar atrapar al perro por el cuello, evitando el contacto con él», señala Álvarez Bueno. Ayuda también recurrir a la comida para persuadir al perro.
Confirmar que el perro no tiene dueño
Un perro solitario no siempre es un animal abandonado, ya que puede haberse extraviado. Por ello, conviene asegurarse de que el can no tiene dueño. Los trabajadores de los centros de acogida de animales en adopción le ayudarán a comprobar si el animal está o no identificado (si tiene microchip). «Cuando alguien nos llama, lo primero que hacemos es preguntar si ha comprobado que el animal tiene microchip», explica María Costoya, responsable de prensa y marketing de la Asociación Nacional de Amigos de los Animales (ANAA). Las clínicas veterinarias, e incluso la Policía Local o el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), también cuentan con lectores de microchip.
«Otra recomendación es llenar la zona en la que se ha encontrado al perro de carteles con su foto, para descartar que pueda tener un dueño que le esté buscando», indica María Costoya. Si al cabo de una semana nadie reclama al animal, se puede pensar que el perro ha sido abandonado. Entonces podrá comenzar la adopción.
Cuando se opta por acudir a un centro de adopción de perros, sus trabajadores informarán acerca del modo de ayudar a este animal. Otra opción pasa por acudir a las perreras municipales, aunque en este caso lo habitual es que el perro se sacrifique en pocas semanas.
Tiempo de adaptarse a la casa
El estado de salud del perro hallado en la calle debe examinarse. Hay que someter al animal a un examen veterinario exhaustivo, que ayude a descartar enfermedades y a tratar de forma adecuada cualquiera que pudiera diagnosticarse. Es momento, además, de desparasitarlo y vacunarlo. Acondicionar un sitio tranquilo y separado del resto ayudará al perro a estar calmado durante estos primeros días en casa.
En casa, conviene que el perro recogido de la calle se sienta independiente, sin agobiarle
«El perro adoptado que llega directamente de la calle debe pasar unos días en un sitio restringido, separado del resto de animales o niños que podamos tener en casa», explica Álvarez Bueno. La habitación debe contar con un lugar caliente para que el perro descanse, con comida y agua.
El perro debe sentirse «independiente y no agobiarle» durante estos primeros días, explica la etóloga. «No debemos forzar el contacto. El perro se acercará poco a poco a nosotros y pronto nos empezará a lamer y querrá establecer un contacto con su nueva familia», agrega.
Paciencia con el animal recogido
La experta en comportamiento canino recuerda además que se debe ser paciente con un perro abandonado recién llegado a casa. «Puede que el animal tenga un comportamiento extraño durante los primeros días. Tal vez muerda los muebles o realice sus necesidades dentro de casa», explica la veterinaria, para quien son unas conductas pasajeras.
«Hay que dar siempre una oportunidad al perro y ofrecerle un tiempo para adaptarse a su nuevo entorno», indica Álvarez Bueno. Pasado este periodo de adaptación, se puede empezar a reeducar al perro adoptado, un proceso tan delicado como satisfactorio.
Capturar un perro abandonado no siempre es sencillo: pida ayuda a un experto, una asociación protectora o veterinario.
Tapar con una manta los ojos del can abandonado ayuda a apresarle.
Asegúrese de que el perro no tiene dueño.
En casa, proporcione al animal independencia durante los primeros días.
El perro recogido de la calle necesita un tiempo de adaptación a su nueva casa, tras el cual, se puede empezar a reeducar.