Las causas por las que un perro agrede a otros canes pueden ser diversas. Pero entre las más comunes se encuentran la incorrecta socialización del perro, la falta de normas en casa o que sea muy territorial y dominante. Para estos casos, existen cuatro pasos que los dueños de un perro agresivo con otros canes deben dar: averiguar la causa, marcar pautas de comportamiento para el perro, no aislarle y acudir a un educador canino.
Perros que agreden o atacan a otros perros
Tres de cada diez perros tienen problemas de agresividad con otros canes, pero este problema de conducta puede solucionarse
Un can que agrede a otros congéneres tiene un problema de conducta, que debe tratarse y solucionarse cuanto antes. Las consecuencias de este problema pueden ser graves, ya que los encontronazos con otros perros también se pueden trasladar a las personas.
Las mordeduras de un can, además, pueden provocar graves heridas. Por ello, es importante abordar este problema de conducta cuanto antes. Los primeros cuatro pasos que debe dar un dueño con un perro que agrede a otros canes son los siguientes:
1. Perros que atacan a otros canes: averiguar la causa
La agresividad entre perros es un problema de conducta que suele requerir la intervención de un educador caninoLa razón por la que el animal tiene encontronazos con otros perros es clave para poder abordar este problema de conducta. Por lo general, «las razones por las que está provocada la agresividad del perro con otros congéneres son una socialización incorrecta, la territorialidad, una posición jerárquica incorrecta del can en el grupo familiar, la falta de normas en casa para el perro, así como un carácter demasiado dominante», explica Gregorio Sánchez, educador canino.
Las situaciones mencionadas se refieren a cachorros que no se han relacionado con sus congéneres lo suficiente y, en consecuencia, no han aprendido las pautas de comportamiento canino. Pero también a perros que son muy posesivos con lo que consideran su territorio (casa, dueños).
Otros canes pelean por estar en lo alto de la jerarquía de su grupo familiar (dueños, otros perros), por tratar de imponerse a otros perros o porque quieren ser los líderes.
2. Perros agresivos: marcar normas y pautas de comportamiento
Órdenes como «sit, quieto o tumbado» son de gran ayuda para controlar al perro cuando se encuentra con otros canes en la calle. Sánchez explica la forma de actuar en este sentido. «Cuando otro perro se acerca, es el momento de dar la orden al can conflictivo para que se tumbe; de esta manera, aprende a estar relajado ante la presencia de otro animal», aconseja este educador.
Lo idóneo es conseguir que ambos perros logren pasear juntos. Y que el animal con el problema de conducta tolere, de manera paulatina, la relación con otros canes en la calle. Si el perro asocia la interacción con otros canes con experiencias positivas, su conducta agresiva desaparecerá de forma gradual.
3. Enfrentarse al problema y no aislar al perro peleón
El hecho de no enfrentarse a la presencia de otros perros para eludir encontronazos no soluciona el problema. «Un perro que agrede a otros congéneres puede hacerlo también con sus dueños», afirma Sánchez.
Por ello, es recomendable tomar medidas cuanto antes, para solucionar el problema de conducta del can.
4. Acudir al educador canino
El coste de la intervención de un educador canino durante cuatro meses está cerca de los 900 eurosLa conducta agresiva del perro con otros canes es de las situaciones que suele necesitar la intervención del experto en comportamiento canino.
El entrenamiento de un perro con problemas de agresividad hacia otros congéneres puede tardar entre tres y seis meses, según el caso. Para obtener resultados satisfactorios, los dueños tienen que participar de manera activa en el proceso de educación.
Las tarifas unificadas no existen en el sector de la educación canina, pero el precio del tratamiento durante cuatro meses con un educador canino oscila en torno a los 900 euros.
No existen datos globales sobre porcentaje de perros con comportamiento agresivo con otros congéneres en España. Pero, según Miguel Ibáñez, profesor de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, y experto en comportamiento animal, “si ciframos en un 30% el porcentaje de perros con problemas de agresividad hacia otros canes, nos acercaríamos mucho a la realidad de esta cuestión”.