Encontrar un piso de alquiler para nosotros y nuestro perro puede resultar difícil. Algunos propietarios rechazan que haya animales en su inmueble o ponen trabas a los inquilinos que buscan una casa cuando están acompañados de su can. Pero hay cinco claves esenciales para tener éxito cuando se tiene perro y se busca un piso de alquiler: la información es esencial, el barrio debe ser apropiado para el can, hay que revisar el contrato, contemplar la posibilidad de contratar un seguro y recurrir a buscadores en Internet para encontrar un piso de alquiler que admita al perro.
La búsqueda de un piso de alquiler puede complicarse cuando tenemos como compañero a un perro. No todos los propietarios de inmuebles aceptan de buen grado la presencia de animales en sus edificios. Nuestra mascota en un piso alquilado puede ser una fuente de conflictos tanto entre el arrendador y el inquilino, como con la comunidad de vecinos.
No todos los propietarios de inmuebles aceptan de buen grado la presencia de animales en sus edificios
Solo en la ciudad andaluza de Córdoba, ocho de cada diez denuncias que llegan a la Policía Local a través del servicio telefónico «Línea Verde», que vela por la defensa del medio urbano, están relacionadas con problemas de convivencia en las comunidades de vecinos. Entre las quejas más frecuentes figuran los ruidos por los altos volúmenes de televisores y equipos de música, junto con los ladridos de perros. Esta situación se repite de forma similar en la mayoría de los municipios españoles.
1. Para alquilar con el perro la información es esencial
Ponerse en contacto con el propietario del piso es una de las claves para conocer su postura al aceptar al perro en su edificio y evitar problemas a largo o medio plazo. Conviene hacerle todas las preguntas necesarias para asegurarnos de que nuestro perro será bien recibido en la casa. La raza y el tamaño del can pueden ser factores determinantes para que ciertos arrendatarios reciban bien al perro.
Un dueño responsable que muestre la cartilla de vacunación y una carta del veterinario tiene más facilidades para encontrar un piso para él y su perro
Un dueño responsable, sin embargo, tiene más facilidades para encontrar un piso adecuado para él y su perro. Mostrar la cartilla de vacunación actualizada demuestra que es una persona cuidadosa con la atención del animal. Obtener una carta de recomendación del veterinario, e incluso de los anteriores vecinos, son argumentos valiosos a nuestro favor para lograr un piso de alquiler con nuestro perro.
2. El barrio debe ser apropiado para el can
Concertar una entrevista con el propietario en el inmueble que se pretende alquilar puede ser una buena oportunidad para determinar si la casa y el entorno se adaptan a las necesidades de nuestro amigo de cuatro patas. Es la ocasión de localizar los parques más cercanos y apropiados para pasear al aire libre con el perro.
Recuerde que un perro adulto sano necesita un mínimo de treinta minutos de actividad física diaria para mantenerse, y envejecer, de forma saludable. El perro precisa los largos paseos y los juegos para mantenerse en forma y cuidar de su salud, tanto física como mental.
3. Revisar el contrato para evitar problemas con el animal
El contrato de alquiler firmado será el documento legal que determine los usos permitidos o prohibidos en la vivienda, esto explica que la presencia de nuestro perro debe estar autorizada en él. No obstante, algunos contratos impiden de forma clara la entrada de canes en la vivienda. Hay que revisar con atención el documento y cerciorarse de que se entiende con claridad todo lo escrito en relación con la presencia del perro.
4. Un seguro por los posibles daños que puede causar el perro
Contar con un contrato de alquiler que permita la convivencia del perro no es siempre suficiente. En ocasiones, puede ser recomendable contratar un seguro canino que cubra posibles destrozos que el can pueda causar en el piso.
Admitir la presencia de perros en el piso alquilado no implica que estos puedan causar daños. Cuando nuestro animal provoca destrozos en la vivienda, lo habitual es que nosotros afrontemos los gastos, incluidos los debidos a posibles daños que cause nuestra mascota.
5. Buscadores en Internet para encontrar piso con un animal
Internet supone un valioso recurso para cualquier persona que busca piso en una ciudad y, de forma especial, para el dueño de un perro. Algunos buscadores web utilizados para encontrar casa a través de la Red cuentan con la opción de seleccionar solo las viviendas en las que el perro será bienvenido.
Es el caso del sitio web Trovit, con un apartado específico de alquiler con animales, o el buscador Nuroa, que permite activar la casilla mascotas para los amantes de los perros que se niegan a renunciar a la compañía de sus amigos.
Ponerse en contacto con el propietario del piso es una de las claves para conocer su postura en cuanto a la aceptación del perro en su edificio y evitar problemas a largo o medio plazo.
El barrio y el entorno de la casa alquilada debe contar con espacios verdes y adaptarse a las necesidades de nuestro amigo de cuatro patas.
Obtener una carta de recomendación del veterinario, e incluso de los anteriores vecinos, son argumentos valiosos a nuestro favor para lograr un alquiler con nuestro perro.
Asegúrese de que la presencia del perro en la vivienda está autorizada en el contrato.
Algunos buscadores de pisos en Internet cuentan con la opción de seleccionar solo las viviendas donde el perro será bienvenido.