No todo el mundo puede tener perro, debido a circunstancias como la falta de tiempo para atender al animal. Sin embargo, hay personas a quienes les encantaría tener un perro en casa y están muy comprometidas con la protección de los animales. Por ello, el apadrinamiento se ha convertido en una vía a través de la cual estas personas pueden colaborar con la manutención de un perro de un albergue. En algunos casos, también se da la opción de pasear a los perros, hacer actividades con ellos e, incluso, cuidarlos unos días en casa. Conozcamos en qué consiste el apadrinamiento y cómo se apadrina un perro.
Cada albergue tiene sus propias normas con respecto al apadrinamiento. Incluso algunos carecen de esta posibilidad y solo permiten adoptar animales.
No todos los perros pueden ser candidatos para un apadrinamiento que implique salidas puntuales del albergue
En el caso de la Asociación Amigos del Perro de Asturias , cuentan con 40 padrinos, que abonan una cantidad de seis euros al mes para la manutención de los perros en su albergue. En esta asociación tienen desde «padrinos locales que llevan a los perros a la playa, a pasear o a su casa durante el fin de semana, hasta quienes viven fuera de Asturias y se les manda una foto porque no tienen contacto con sus animales apadrinados», explica Alejandra Mier, coordinadora de los dos albergues que tiene en Asturias la asociación.
Perros para apadrinar
No todos los perros pueden ser candidatos para un apadrinamiento que implique salidas puntuales del albergue. Los hay que acaban de llegar al centro de recogida y todavía están en periodo de adaptación a su nueva circunstancia, por lo que no conviene desestabilizarles con padrinos a quienes puedan confundir con nuevos dueños. En estos casos, sí se puede ayudar como padrino con la aportación económica para la manutención en el albergue.
Los perros que llevan muchos años en el albergue y están totalmente adaptados sí pueden tener unos padrinos que los saquen del albergue de manera puntual: excursiones, paseos o fin de semana en casa. Estos canes no tienen problema en volver tras las salidas puntuales. Alejandra Mier explica que «son perros que llevan 8 años en el albergue y a los que les enriquece la experiencia de salir del albergue con sus padrinos». Añade que a algunos perros les gustan los cambios y para otros cualquier variación en su rutina les supone mucho estrés. «En el caso de los gatos, las salidas del albergue con padrinos no son viables, porque el gato es un animal que se estresa con facilidad con los cambios de este tipo», explica Alejandra Mier, de la Asociación Amigos del Perro.
Pasos para apadrinar un animal
- Ponerse en contacto con un albergue de recogida de animales que contemple la opción del apadrinamiento.
- Aportar los datos de la persona que apadrina: nombre, dirección y teléfono.
- Acordar la forma de pago para la manutención del perro en el albergue. No son cantidades muy cuantiosas y sirven para atender las necesidades básicas del perro mientras vive en el albergue: alimentación, atención sanitaria, adquisición de accesorios, como una correa o una colchoneta para dormir.
- A menudo, al padrino se le manda una foto del animal que ha apadrinado y se le mantiene informado sobre la estancia del animal en el albergue, esto es, si se ha adoptado, si está enfermo o si ha fallecido.
Una persona puede apadrinar a uno o varios animales. No hay un tiempo obligatorio de permanencia como padrino, es decir, los padrinos se pueden dar de baja cuando consideren oportuno. Quienes hacen actividades con su animal fuera del albergue, deben ser mayores de edad.
Apadrinar un animal o ser su canguro
Las asociaciones y protectoras que acogen a perros abandonados, vagabundos o perdidos no tienen, en muchas ocasiones, sitio para todos. Puede ocurrir también que los animales que llegan a sus instalaciones sean demasiado pequeños o necesiten cuidados especiales y requieran un espacio más íntimo o personalizado. Algunas personas hacen ese trabajo de cuidados exclusivos: son los canguros.
Un candidato para apadrinar no es igual que uno que necesita un canguro. En el primer caso, es una modalidad de ayuda económica para el albergue, que no implica necesariamente el contacto directo con el animal apadrinado. En el segundo caso, la persona que lleva a cabo la labor de canguro del animal, sí entra en contacto directo con el animal. Se cubren unas necesidades específicas del animal de manera puntual, que no se pueden satisfacer en el albergue.
Los cachorros que necesitan alimentación con biberón son uno de los grupos que necesitan la colaboración de las personas que hacen el papel de canguros.
Cada albergue tiene sus propias normas con respecto al apadrinamiento de perros
Son perros menores de un mes. Para poder acoger a uno de estos cachorros, se debe tener una buena disponibilidad horaria ya que, entre otros cuidados, necesitan tomar el biberón cada tres horas. Al no estar aún vacunados, no pueden salir a la calle, por lo que harán sus necesidades en casa. Conocer estos y otros factores es fundamental para ser canguro de cachorros de biberón, muy tiernos, pero que requieren esfuerzo y paciencia.