Una dieta del perro rica en fibra evita el estreñimiento. Hay que tener en cuenta, no obstante, que los perros ancianos padecen más atasco intestinal que los canes jóvenes y que algunas enfermedades y tumores pueden estreñir al perro. En algunos casos más graves, este puede necesitar medicinas para poner fin a su estreñimiento.
Un perro estreñido no nace, sino que se hace. Si a su perro le cuesta tiempo y esfuerzo defecar y, cuando lo consigue, las heces son escasas, de tamaño pequeño y duras, usted tiene en casa un perro estreñido. Cuidar de la dieta del perro es una de las claves para prevenir, y con el tiempo corregir, el estreñimiento del can
Una dieta del perro rica en fibra evita el estreñimiento
Una dieta inadecuada, que no contenga la cantidad necesaria de fibra, verduras y otros nutrientes adecuados para que su alimentación sea equilibrada, puede desencadenar de forma frecuente el estreñimiento del perro. Una alimentación apropiada favorece el correcto tránsito intestinal y, por lo tanto, evita el estreñimiento.
La dieta del perro debe adaptarse a su edad para prevenir el estreñimientoLos alimentos comerciales de alta gama hoy en día (pienso seco y húmedo) están adaptados a la edad, tamaño y nivel de actividad física del perro, con el fin de ofrecerle una dieta equilibrada, acorde a sus necesidades y que le ayude a mantener un tránsito intestinal adecuado. De esta manera, un cachorro de seis meses no tiene las mismas necesidades nutricionales que un perro que ha superado los ocho años, ya que el animal menor de un año necesita un alimento que le aporte más energía que un perro mayor.
Asimismo, una dieta casera no equilibrada puede provocar en el perro problemas de estreñimiento. Los huesos, también. «Un empacho de huesos puede ser el desencadenante de un atasco en el recto, que impida al perro defecar con normalidad», explica Juan Antonio Aguado, veterinario. Los huesos, además de provocar atasco intestinal, también pueden perforar el estómago del perro cuando están cocinados.
Una correcta hidratación, es decir, que el perro ingiera la cantidad de agua que necesite, también es importante para su salud y ayuda a que su digestión se desarrolle de manera adecuada.
Los perros ancianos padecen más atasco intestinal
El perro mayor padece más problemas de estreñimiento que el animal joven
La edad es otro de los factores que influyen para que el perro padezca estreñimiento. El intestino de un perro de más de ocho años no funciona igual que el de un cachorro. El metabolismo cambia, se ralentiza, y hay más probabilidades de que el perro defeque con mayor dificultad.
Los alimentos específicos para perros mayores deben prevenir el estreñimiento, a través de una composición que les aporte la cantidad de fibra adecuada para mantener en buena forma su tránsito intestinal.
La afección de próstata, en el caso de los machos caninos, también es un factor desencadenante del estreñimiento del perro. Esto se debe a que la zona inflamada de la próstata presiona sobre el recto e impide al perro defecar con normalidad.
Una vez que el perro padezca una obstrucción intestinal que le impida defecar con normalidad, el veterinario aplicará un tratamiento que, según el caso, puede consistir en productos laxantes, enemas o pastillas y jarabes específicos para el estreñimiento.
Sin embargo, también es fundamental un cambio en los hábitos alimenticios del perro para mantener el estreñimiento a raya.
Los tumores pueden estreñir al perro
Los tumores en el recto impiden el tránsito intestinal y provocan estreñimiento al perro. Por ello, cuando el animal tiene problemas habituales para defecar, es recomendable acudir al veterinario para llevar a cabo una revisión y descartar posibles tumores.
El cuerpo del animal tiene sus propios mecanismos de defensa para conseguir defecar, incluso en caso de tumores. «Los tumores en el recto provocan el estrechamiento del conducto y, por ello, las heces del perro se tornan líquidas, para poder salir por los laterales del recto», precisa el veterinario Juan Antonio Aguado. Esto explica que algunos perros con tumores en el recto tengan diarrea.
Las afecciones en las glándulas perianales del can (situadas en sendos extremos de su ano) son otra causa frecuente de estreñimiento en el perro. Estas contienen un líquido con un olor fuerte y penetrante que sirve al animal para dejar huellas olorosas para sus congéneres.
Estas glándulas o sacos anales se vacían cuando el perro defeca. Pero en caso de quedar restos, el perro sentirá molestias, que se traducen en dificultad para defecar debido al dolor. En estos casos, realizan unos movimientos muy característicos: arrastran la zona del ano por el suelo para aliviar la presión que les provoca el líquido acumulado en las glándulas perianales.