El chubasquero es una prenda que no debe faltar entre los accesorios del perro. Es la mejor forma de proteger al can de la lluvia, y permite disfrutar de los paseos durante los días nublados o cuando amenaza tormenta. Pero, ¿por qué no ahorrar y fabricarlo en casa? Este artículo explica cómo hacer un impermeable para el can en cinco pasos muy sencillos.
Crear un impermeable casero para el perro tiene algunas ventajas de peso: es un modo de reducir los gastos del can y ahorrar dinero en casa. Pero, también, permite diseñar el abrigo canino según los gustos y necesidades.
Crear una gabardina impermeable para el perro en casa, además, no es complicado. Basta con seguir cinco pasos sencillos, y tener a mano las siguientes ideas y patrones disponibles en Internet.
Paso 1. Encontrar un plástico o bolsa impermeable para el perro
La forma más sencilla (y barata) de fabricar un chubasquero para el perro en casa es encontrar una bolsa de plástico, de material resistente. Las de basura (cuanto más fuertes, mejor) pueden servir, como muestra el sitio web Wiki how.
El tamaño tiene que ser suficiente para cubrir todo el cuerpo del animal. Se corta en el plástico, con ayuda de unas tijeras, y se abren los huecos por donde deben salir las patas del can. Hay que hacer otro triángulo al final, para la cola.
Con ayuda de un cinturón de tela, se ajusta el plástico a la cintura del animal, y se deja un trozo sobrante en la parte delantera para utilizarlo como capucha.
Si se quiere fabricar un chubasquero para el perro un poco más elaborado y duradero, hay que hacerse con un retal de material impermeable. Sirve una gabardina rota o en desuso que haya por casa. Y seguir los cuatro pasos siguientes.
Paso 2. Añadir botones o velcro al abrigo canino
Una pieza de tejido impermeable fijada con botones o velcro puede convertirse en un sencillo, pero también estiloso, chubasquero para el perro, como propone el blog de Martha Steward. En este vídeo se explica cómo hacer una gabardina canina de este modo.
Para los más mañosos (o pacientes) las posibilidades de diseños con botones y velcros se disparan. Si se aprende a tomar las medidas del perro, es posible crear patrones de chubasqueros caninos propios y creativos.
Un cinturón de tela permite ajustar el impermeable casero del perro a su cuerpo
¿Cómo medir al perro? Hay que tomar las longitudes del contorno del cuello y del pecho, así como la largura del animal, desde el cuello hasta su cola. Se anotan las tres medidas y se dibuja sobre un papel la silueta de lo que será el impermeable del perro. Este sencillo patrón puede servir de base.
Paso 3. Una capucha para el perro bajo la lluvia
El impermeable del perro se puede completar con una capucha que proteja, además, la cabeza y oídos del perro del agua de lluvia. Las ideas para fabricarla de un modo sencillo son variadas.
Una sencilla capucha y una cinta reflectante completan el chubasquero canino
Una propuesta es crear el capuchón por separado y, después, anclarlo al resto del chubasquero con un poco de velcro o corchetes resistentes de gran tamaño. En el sitio web Veo verde proponen construir un gorro impermeable para perros floreado, de este modo.
No es complicado elaborar el gorro de la gabardina canina. Hay que cortar una media luna en el tejido, del tamaño de la cabeza del perro, como propone el siguiente patrón.
Hacerlo algo más grande permite, además, crear una pequeña visera para el perro, que impedirá que el agua de lluvia caiga en sus ojos.
Paso 4. Pegar una cinta reflectante al chubasquero del can
Los días de lluvia se caracterizan por la escasa luminosidad. Por ello, si se quiere proteger al perro durante las tormentas, hay que velar también por su seguridad: contar con un material reflectante en el chubasquero hará que el can sea más visible, tanto para vehículos como para bicicletas.
Dotar de una cinta reflectante al impermeable del perro es muy sencillo. Esta puede coserse o, de nuevo, adherirse con velcro. La tira reflectante, además, se puede aprovechar para ajustar la gabardina al cuerpo del animal (en la cintura), a modo de cinturón, como explica este vídeo.
Paso 5. Añadir material caliente al impermeable del perro
El chubasquero canino puede completarse si, además de proteger al perro de la lluvia, le resguarda del frío. ¿Cómo? Basta con reutilizar un viejo jersey en desuso que haya por casa, y aprovechar una de sus mangas, como explica este vídeo.
Otro modo, un poco más elaborado, es crear el chubasquero del perro con una doble capa: una superior, impermeable, y la inferior, de un material que abrigue. Es la propuesta del sitio web Sewing 4 dummies.
Ya está listo el chubasquero del perro. ¡Preparado para tormentas y chaparrones!
Chubasqueros, botas de agua, carritos para la bicicleta protegidos con una cubierta impermeable, paraguas caninos… Hay muchas formas de proteger al perro del agua y disfrutar de las salidas al aire libre con el can, llueva o truene.
¿Es importante proteger al perro del agua? La respuesta es afirmativa. Si las personas disfrutamos de complementos que nos resguardan de los chaparrones, ¿por qué no ofrecer al compañero canino el mismo trato?
Estos sencillos artilugios, además, pueden evitar algunas molestas enfermedades del can, entre otras, los refriados, que también atacan a los perros.
Mientras, la gabardina del perro cuida su pelaje y evita que se manche con la suciedad que arrastra el agua de las tormentas.
Sin embargo, será casi inevitable que un perro no se moje algo tras los paseos bajo la lluvia. Aunque lleve chubasquero. Por lo que secar con esmero su pelo y patas tras las salidas es esencial para cuidar al peludo compañero como merece.