Muchos perros se revuelven y emiten sonidos mientras duermen. Esto significa que sueñan y que, además, su descanso no es tan distinto al humano. En este artículo se explica por qué sueñan los canes y si tienen pesadillas, cómo saber cuándo sueñan, el contenido de sus sueños, así como las similitudes y diferencias del descanso del perro con el de los humanos, ya que es un animal que se despierta con frecuencia, como le pasa al lobo.
¿Los perros sueñan?
Los perros sueñan para fijar las experiencias de cada día en su memoria
Los canes, como las personas, sueñan. «Cuando el perro cae dormido, entra en una fase de sueño llamada de onda lenta, que se intercala con sucesivas fases de sueño profundo o REM», afirma la neuróloga veterinaria Valentina Lorenzo. Es en esta etapa REM de descanso profundo cuando el animal sueña. «Es un comportamiento normal que le sirve para fijar sus experiencias y lo que ha aprendido durante el día», asegura Lorenzo.
Gracias al estudio de los encefalogramas que analizan la actividad cerebral, los científicos han demostrado que el can sueña, una opinión compartida por la psicóloga Stanley Coren. «De hecho, que los perros no soñaran nos habría producido una sorpresa mayor que saber que sí lo hacen», señala en un artículo de la revista científica Psychology Today.
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¿Los perros tienen pesadillas?
Los patrones del sueño del perro se asemejan a los de los humanos
El descanso del can, dicen los expertos, no es tan distinto al de las personas. El sueño del perro también atraviesa una serie de fases, que se intercalan a lo largo de las horas de reposo. Y los encefalogramas, o estudios del funcionamiento del cerebro del animal, dibujan un gráfico que no dista mucho del que se construye para una persona.
«Hay una similitud entre las fases del sueño del perro y las humanas», señala Valentina Lorenzo. Cuando un can se queda dormido, al contrario de lo que pudiera parecer, aumenta su actividad cerebral. Es lo mismo que ocurre en las personas. Los científicos se refieren a este primer tramo de sueño como fase de onda lenta o SWS (slow wave sleep, sueño de onda lenta).
Este sueño lento del perro se interrumpe cada cierto tiempo, por las llamadas etapas REM (rapid eyes movement, movimiento rápido de ojos). Entonces, su actividad cerebral se multiplica y, si se tuviera la oportunidad de mirar la pantalla del encefalograma, se vería cómo el número de ondas que atraviesan por minuto el monitor también incrementa. «Se conoce como fase REM porque, durante ella, el perro experimenta movimientos oculares rápidos. Es entonces cuando el can sueña«, explica Lorenzo, quien trata a perros con trastornos de sueño en su clínica de Madrid.
Durante este periodo de gran actividad del cerebro, el animal puede agitarse, mover sus patas de un modo veloz, e incluso, articular sonidos y ladrar. El can está relajado, pero su cerebro trabaja más de lo que lo ha hecho durante el resto del día.
¿Qué sueñan los perros?
Aunque el perro no pueda contar qué ha soñado, «nos lo podemos imaginar, por comparación con lo que sueñan las personas», comenta Lorenzo. La neuróloga canina indica que confrontar los patrones de sueño del humano con los dibujos del encefalograma del can permite entender, al menos en parte, qué piensa durante su reposo.
«Podemos presuponer que un perro que se agita o mueve rápido sus patas sueña que alguien, o algo, le persigue o que está jugando«, afirma Lorenzo. En otras ocasiones, el can imaginará ingerir un sabroso plato de comida (una delicia para un perro glotón) o que es él quien persigue a otro congénere.
Entonces, si un can sueña, ¿también puede tener pesadillas? «Por supuesto», añade la experta. «Por analogías con el ser humano, el perro, al igual que puede tener sueños placenteros, puede tener pesadillas o sueños negativos», añade.
El sueño del perro, muy humano
En cualquier caso, está claro que el descanso correcto es fundamental tanto para un can como para las personas. «Dormir es muy importante en todas las etapas del animal. La falta de sueño le afecta tanto físicamente como a sus capacidades mentales», concluye Lorenzo. Como para los humanos, para el perro, soñar es necesario.
Como ocurre en las personas, las fases rápidas y lentas del descanso canino se entremezclan durante las horas de sueño. «Si un perro duerme ocho horas durante la noche, solo una tercera parte del tiempo se encontrará en la fase de sueño profundo, REM», explica la neuróloga. El resto del tiempo transcurre en onda lenta.
El patrón del sueño del can es, además, similar al de las personas: el dibujo en el encefalograma es parecido. No debe ser casualidad que los perros y los humanos compartan más del 90% de su material genético, aunque también hay diferencias.
El perro, como el lobo, alterna periodos de descanso con minutos de vigilia
Aunque el sueño del can se parece mucho al de las personas, hay algo que los distingue. El animal se despierta con frecuencia durante su descanso y, como su ancestro el lobo, alterna el sueño con los ratos de desvelo.
“Definitivamente, el perro está más tiempo en vigilia que las personas durante la noche y se despierta bastantes más veces”, explica Lorenzo. “El can duerme entre cinco y veinte minutos seguidos y se desvela otros cinco minutos para, después, coger de nuevo el sueño”, agrega. Este comportamiento responde a que el perro aún conserva muchas de las conductas de su ancestro, el lobo.
“Los canes son cazadores defensores y necesitan estar alerta“, señala la veterinaria Mercedes González. Por este motivo, su fase REM, de sueño profundo, dura poco y, gracias al oído tan sensible con que cuentan, se pueden despertar rápido si surgiera alguna amenaza”, apunta la veterinaria. Dormir de un modo demasiado profundo puede resultar peligroso para un animal solo en el competitivo medio natural.