Ya sea porque deja de comer de golpe o porque es un recién adoptado y no prueba la comida, el hecho de que el perro no se acerque al plato de alimento resulta muy estresante. Existen varias razones que justifican por qué un can no come: desde una enfermedad, el estrés, una comida poco apetecible o el simple aburrimiento. Determinar la causa, sin embargo, es importante y urgente. Por eso, en el siguiente artículo se tratan los posibles motivos por los que el perro no come y cuáles son las soluciones: acudir al veterinario, utilizar comederos-puzles o echar mano de un poco de yogur natural sin azúcar, entre otras.
Mi perro no come: ¿qué le pasa?
La anorexia o pérdida de apetito de un perro puede resultar un indicador de un problema grave. Este es el motivo por el cual, si la mascota no come, lo primero que se debe hacer es acudir de forma urgente al veterinario.
Un perro que no come puede sufrir un problema de salud, pero también estar aburrido o rechazar la comida por falta de estímulo
La razón por la que el peludo amigo no come puede ser una enfermedad o problema de riñón. Los problemas dentales caninos, como sarro, dolores o infecciones fuertes de boca, incluso las obstrucciones de su aparato digestivo son otras causas frecuentes. En otros casos, sin embargo, la pérdida de hambre en un can puede derivarse de una depresión, tristeza, estrés o ansiedad.
De cualquier forma, es importante ir al doctor canino para que ayude a su propietario a detectar el origen de la pérdida de apetito en el perro, y así juntos encontrar la mejor solución.
¿Cambio su alimento?
Un cachorro canino no tiene las mismas necesidades que un can adulto o que uno anciano. Los requerimientos nutricionales del perro, como les ocurre a los humanos, varían con la edad. Esto explica por qué, cuando el perro no come, la primera pregunta que hay que hacerse es si se ha escogido bien su alimento.
¿Está aburrido?
La alimentación de un can no tiene por qué ser aburrida. Los comedores puzle para perros y los dispensadores de comida estimulan su mente mientras se alimenta, pues estos artilugios sencillos permiten hacer la hora de la comida del can más divertida e interesante.
«El aburrimiento puede provocar tantos problemas alimentarios a los perros como una dieta no adecuada», explica el veterinario Tony Buffington, de la Asociación Americana de Hospitalizaciones Animales, quien lleva 30 años estudiando la nutrición en canes y felinos. De hecho, trastornos alimentarios como la coprofagia, la alimentación compulsiva y la obesidad, suelen estar relacionados con el aburrimiento y la falta de incentivos psicólogos.
¿La clave? Decir «no» a los cuencos de comida para perro rebosantes de bolitas. La tendencia que se impone es hacerles trabajar por su comida. Bolitas de pienso ocultas en tubos, que el animal necesita sacar con ayuda de sus patas, y hasta comedores más parecidos a un puzle que a los clásicos y poco atractivos platos son algunos de los accesorios para conseguir que la hora de la comida sea un poco más excitante para el perro.
¿Le gusta su alimento?
¿Por qué siempre repetir la misma propuesta en el cuenco de comida canina? Las croquetas serán más apetecibles, si se humedecen con agua caliente. Mediante este gesto sencillo, se despierta el olor del alimento y se estimula a los perros.
¿Más ideas sabrosas? La comida hay que conservarla en las mejores condiciones, cerrada y lejos de humedad y sol, para que no pierda olor ni consistencia. Un pequeño truco: el can puede encontrar más estimulante la comida que se le ofrezca en la mano que el alimento que se deposite en su comedero.
Y ¿por qué no mimar un poco más al infatigable amigo de cuatro patas? «Combinar el pienso del perro con pollo o huevo una vez a la semana, además, rebaja la ansiedad del animal durante el día», aconseja el veterinario y dietista canino Carlos Alberto Gutiérrez, autor del blog Nutricionista de Perros. La razón es que los alimentos naturales le ayudan a obtener serotonina, un neurotransmisor que reduce el nerviosismo y favorece la felicidad, tanto en personas como en canes.
¿Le mimo con recetas caseras?
La mayoría de los veterinarios aconsejan proporcionar al perro pienso de buena calidad o dieta seca. Sin embargo, como en tantas otras ocasiones, ser demasiado rígido puede provocar que el animal acabe por rechazar su alimento. «¿Alguien puede imaginarse comer cada día la misma comida?», se pregunta Gutiérrez. «Por el mismo motivo, no es extraño imaginar que un can que siempre come lo mismo acabe por aburrirse», dice este veterinario.
Unas recetas de cocina casera para perros, controlada y diseñada por un dietista, pueden ser una alternativa saludable para ofrecer al peludo amigo que rechaza su alimento una comida más variada. Esta propuesta, además, permite elegir la calidad de los alimentos para el can, así como evitar ingredientes que le provoquen alergia.
Yogur para despertar el apetito del perro
Pero, ¿qué hacer cuando el desinterés del perro por su comida es mayúsculo? Los ingredientes novedosos, como un poco de yogur natural, pueden ayudar al can sin apetito. A muchos animales el cambio ya les anima a comer. Para introducirlo solo se tiene que verter una cucharada de este lácteo, sin aditivos ni colorantes artificiales, sobre sus croquetas y mezclarlas bien. Con ello, además, se ayuda a que sus intestinos trabajen mejor.
No es recomendable, sin embargo, ofrecer las sobras de la comida humana al perro, ni dejarle que pique algo mientras se cocina o cuando come la familia. Estas invitaciones pueden acabar por provocar el desinterés del can por su propia comida.