El perro es un amigo que forma parte del hogar. También en Navidad. Es un animal social, fiel y cariñoso, que disfrutará si se le incluye en las celebraciones. A continuación se proponen cinco ideas simpáticas y seguras para lograr unas fiestas navideñas más perrunas. Entre ellas, decorar el árbol con animales, colocar regalos de Reyes para el can, crear tarjetas móviles con perros, prepararle galletas y comidas y duplicar los siempre infalibles paseos y juegos.
1. Decorar el árbol de Navidad con animales
La pasta de sal elaborada en casa es un sencillo material similar a la plastilina que se moldea con facilidad. Posibilita crear pequeñas figuras con las que adornar la casa y el árbol de Navidad.La pasta de sal casera permite hacer figuras y plasmar la huella del perro en la masa
La silueta creada puede tener la forma del perro de la casa o se puede plasmar la huella de su almohadilla en la masa. Esta es una divertida y económica forma de decoración navideña que cuenta con la inestimable colaboración de los peludos inquilinos del hogar.
Para elaborar la masa de sal en casa se necesita un vaso con sal, dos de harina, otro de agua y una cucharada de aceite o glicerina. Los ingredientes se mezclan hasta obtener una pasta que no quede demasiado pegajosa. Se moldea (o estampa la huella del perro) y se endurece en el horno, a unos 120ºC, durante unos 30 minutos.
Después, es posible colorear las figuras caninas con acuarelas o pinturas acrílicas. La actividad, por su simplicidad, es apta para niños. Una alternativa consiste en crear las figuras con escayola, como propone el blog Las manualidades.
¡Guau, guau!
2. Regalos bajo el árbol para el can
El perro percibe la emoción e ilusión de la mañana de Reyes o Papá Noel. La familia se reúne alrededor del árbol, abre los paquetes (con el consecuente ruido de papeles), se abraza, ríe.. ¿Y el perro? ¿Por qué no hacerle partícipe de este ambiente festivo?Preparar un sencillo regalo de Navidad para el can no es complicado. Una posibilidad consiste en comprar un juguete para el perro y ofrecérselo ese mismo día, junto con los del resto de la familia. Si se envuelve con papel y se rodea de emoción la entrega (con caricias, palabras amables), el peludo amigo se contagiará, sin duda, de la exaltación del momento.
Existen accesorios de juego para canes que estimulan el olfato y el oído, dos sentidos que el perro ha desarrollado de un modo extraordinario y, en consecuencia, con los que disfruta de un modo muy especial en Navidad.
Otra posibilidad más económica es crear un juguete casero para el perro y rodear la entrega del mismo ambiente festivo.
3. Tarjetas de Navidad móviles con perros
Una tarjeta de Navidad con la silueta de un can, que tome como modelo al perro de la familia y cuya lengua se mueva de un lado al otro. Esta es la divertida propuesta del portal Danielle’s place. Es una idea canina que, sin duda, adorarán los amantes de los animales, tanto adultos como niños.
Cartones de distintos colores y un poco de pegamento de barra bastan para elaborar divertidas postales navideñas con el perro de la familia. Si para construir la cabeza se utiliza una doble capa de cartulina (presionada pero sin adhesivo entre ellas) y se introduce dentro una tira de color rojo, ya está lista la lengua móvil del can.
El perro de la familia no sabrá reconocerse en la felicitación de Navidad, pero será el centro de atención durante su elaboración y después, una vez que se coloque en un lugar preferente del salón, junto con el resto de la decoración.
4. Comidas de Navidad para el perro
Cocinar para el perro en casa es un modo divertido (y saludable) de incluir al animal en las celebraciones, cenas y comidas de Navidad. Siempre que se haga con seguridad y según las recomendaciones del veterinario o nutricionista canino.En el hogar se pueden preparar sencillas recetas navideñas. Un poco de pavo o pollo (deshuesado y sin grasa), queso fresco, patata y harina son los ingredientes que sirven de base para su elaboración.
Las galletas para perros son otro saludable premio durante estas fechas. Pueden utilizarse con entrantes o como premios durante estas celebraciones familiares, aunque conviene no excederse ni utilizarlas como sustitutas de la dieta habitual.
Si el obsequio comestible se acompaña de caricias y palabras amables, serán sin duda un regalo de Navidad completo para nuestro peludo amigo.
5. Juegos, paseos y tiempo para compartir con el perro
En Navidad, es tiempo de disfrutar de los paseos y excursiones con el perro
Las vacaciones de Navidad son tiempo de descanso. Pero además, con ellas, al fin llega el ansiado tiempo libre para disfrutarlo en compañía de los seres queridos. Esto, qué duda cabe, incluye al perro. Si durante el año la rutina ha devorado los tiempos de juego de calidad y los largos paseos a la montaña con el peludo amigo, la Navidad es un buen momento para recuperarlos.
La propuesta lúdica para disfrutar del animal, y él de su dueño, es inmensa. Sencillos juegos en casa permiten disfrutar en el interior cuando afuera llueve o el frío es extremo. Otras opciones son las ideas que ejercitan la mente del can y los juegos de rastreo. Sin olvidar, claro está, los largos y deliciosos paseos al aire libre en compañía de nuestro peludo amigo, el perro.