Vivir el robo de un perro es una situación complicada y triste, que no siempre se resuelve de manera satisfactoria. Seguir ciertas pautas ayuda a la resolución del caso con un final feliz. Y prevenir a través de ciertas actuaciones y medidas, como la identificación del perro con microchip y no dejar solo al animal en la calle, es una buena manera de proteger al perro contra los robos.
Los robos de perros suelen tener como trasfondo u objetivo la cría y venta ilegal de animales para obtener beneficios económicos. Puede darse el caso de que se conozca la identidad de los autores del robo, entonces se puede presentar una querella criminal. Consiste en una declaración escrita, para poner en conocimiento del juzgado de instrucción los hechos, que constituyen el delito de hurto o robo del perro.
Con la presentación de la querella criminal se solicita la apertura de una causa criminal, que será objeto de investigación. Los dueños del perro, españoles o extranjeros, pueden interponer la querella por escrito.
Hay muchos desaprensivos que roban perros para venderlos o utilizarlos en los entrenamientos de peleas de perros
En ella debe figurar: el órgano judicial ante el que se presenta, los datos del querellado, la descripción de los hechos, las diligencias que deben practicarse para comprobar los hechos, la petición para que se admita a trámite y la firma del querellante.
La importancia de las pruebas
Es recomendable adjuntar todas las pruebas que puedan servir para probar los hechos (fotos, testigos o matrículas de vehículos). Si se trata de un delito sobre el que hay un temor fundado de que el presunto culpable pudiera huir de la Justicia, se puede acudir a la policía, para solicitar la práctica de las primeras diligencias y, si procede, detener al delincuente.
Prevenir los robos
Para evitar que roben el perro es recomendable no dejar solo al animal en la calle, por ejemplo, si se va entrar a un comercio. Un animal solo está indefenso y se puede angustiar por la ausencia de sus dueños. Hay muchos desaprensivos que roban perros para venderlos o utilizarlos en los entrenamientos de peleas de perros. En el caso de las hembras, sobre todo si se trata de determinadas razas que alcanzan precios elevados en el mercado, se sobreexplotan para que críen una camada tras otra, con el fin de vender los cachorros en el mercado.
El peligro de comprar un perro a través de Internet
Internet se ha convertido en los últimos años en uno de los escaparates para la venta de animales robados. Las mafias de tráfico de animales utilizan Internet para organizar sus redes fraudulentas. Estos grupos, que actúan movidos por la obtención de beneficios económicos, no respetan las leyes de protección y bienestar animal. Los precios de perros de determinadas razas son más baratos en Internet y puede deberse a que son robados, o a que nos estén dando gato por liebre con el pedrigrí.
No es recomendable adquirir perros por la Red, sin tener referencias de la empresa que vende los animales. En ocasiones, se aprovecha el anonimato que aporta la Red, para sobreexplotar a las hembras, con el fin de que tengan más camadas de las recomendadas para la salud de la perra, y así obtener mayores beneficios económicos. También hay casos en los que se adquieren los perros a precios módicos, en países como Rumanía, y se les adjudican pedigrís que no tienen, para venderlos más caros. Por otro lado, puede darse el caso de se trate de tapaderas de compra-venta de perros robados.
Bienestar de los animales
Cuando se va a adquirir un animal de determinada raza, lo más recomendable es acudir a un criador especializado en ella. Si, además se tienen buenas referencias sobre él de personas de confianza; mucho mejor. Hay que tener en cuenta que quien no vela por el bienestar de los animales que vende; los entrega enfermos, o los mantiene en condiciones higiénico-sanitarias inadecuadas, no es de fiar. De hecho, se trata de una situación denunciable.
A través de la Red, no podemos comprobar si la empresa tiene licencia de apertura o, si en caso de que mantenga perros en sus instalaciones, tiene núcleo zoológico o servicio veterinario para atender a los animales. Por otro lado, cuando se compra un animal , debemos recoger la factura para poder reclamar en caso de que haya algún problema.
Consejos para comprar un perro
- Solicitar la cartilla sanitaria oficial, donde conste toda la información posible sobre el perro como: raza, con el pedigrí correspondiente, las vacunas que se han aplicado y su estado de desparasitación, aunque ésta se suele practicar después de la compra. En la cartilla deben figurar los sellos de las clínicas veterinarias, con el número del colegiado facultativo que corresponda.
- Demandar un documento, donde se manifieste por parte del comprador, que el animal está sano.
- Cuando ya se tiene al perro en casa, llevarle al veterinario para hacerle un chequeo y comprobar que su estado de salud es adecuado.
- El perro debe permanecer con la madre, como mínimo hasta los dos meses de edad. Si el animal se vende antes de esa edad, no se trata de un establecimiento recomendable.
- Si se busca determinada raza, acudir a un criador especializado en ella.
La ventaja del microchip
En caso de que se ignore quien ha robado al perro, se puede interponer una denuncia en comisaría. Es recomendable aportar testigos, si los hubiera. Si el animal está identificado con microchip, las probabilidades de encontrarlo son mayores.
Si el animal está identificado con microchip, las probabilidades de encontrarlo son mayoresHay que avisar al centro de datos donde se registran los códigos de microchip de la comunidad autónoma donde se reside, para dar a conocer la pérdida del animal. De esta manera, si alguien intenta cambiar el código del microchip del perro desaparecido, se podrá detectar.
En el caso de que quien roba al animal, lo abandonara, cuando alguien lo recoja y lo lleve a una clínica veterinaria, albergue o centro de recogida municipal, localizarán a los dueños con facilidad a través del microchip.
Una recompensa económica para quien ofrezca pistas sobre el paradero del perro, es una buena opción para fomentar la colaboración de otras personas en la resolución del caso. También se pueden colocar carteles con una foto del perro, datos de contacto y la cantidad que se ofrece como recompensa.
No dejar al perro solo en la calle. Unos minutos pueden ser suficientes para que un desaprensivo consiga llevarse al perro.
Identificar al perro con el microhip desde que es un cachorro. Se puede colocar en el collar una chapa con el teléfono de los dueños y el nombre del perro.
Denunciar en comisaría la desaparición del animal. Si se sabe quien ha robado al perro, presentar en el juzgado de instrucción una querella criminal por escrito.
Avisar en la base de datos de códigos de microchip de la comunidad autónoma donde se reside sobre la desaparición del perro.
Evitar la adquisición de animales a través de Internet con empresas sobre las que no se tienen referencias.