Convertirse en un emprendedor verde en la actualidad es una buena oportunidad de negocio y de crear empleo sostenible. No obstante, para evitar el fracaso no se puede hacer de cualquier forma, como bien sabe Agustín Valentín-Gamazo Villar. Emprendedor, conferenciante, docente y ganador de varios premios por sus iniciativas de empresas sostenibles, ha fundado proyectos como Enviroo, un portal de empleo verde, y Greenweekend, un evento para ayudar a los emprendedores verdes a que consigan su objetivo. Según este experto, “en España está habiendo una revolución en el sector del emprendimiento verde”.
Durante un fin de semana intensivo ayudamos a los emprendedores verdes a innovar en su modelo de negocio, a saber cómo financiar su idea y a presentarla a posibles inversores o clientes. Se trabaja en equipos sobre las ideas seleccionadas el primer día y muchos mentores con experiencia asesoran a los emprendedores. El domingo un jurado elige las tres mejores ideas, que reciben premios para llevar sus proyectos adelante.
“En España está habiendo una revolución en el sector del emprendimiento verde”Hemos realizado los primeros seis eventos en España con más de 200 emprendedores asistentes. Más del 90% ha dicho que repetirá la experiencia. La aportación de Greenweekend no se aprende en universidades, escuelas de negocio o cursos. Es una experiencia tan intensa y única que nadie sale indiferente. Quien esté interesado en organizarlo en su ciudad puede escribirnos a greenweekend@enviroo.com. En 2014 queremos hacer también varios eventos internacionales, comenzando por Sudamérica.
La crisis ha sacado a la luz multitud de oportunidades para pequeños emprendedores. Además, el medio ambiente es uno de los sectores con más crecimiento en cuanto a empleo. Según datos de Enviroo.com, entre 2012 y 2013 ha habido un crecimiento del 24% en ofertas de empleo ambiental publicadas en Internet. Si tienes claro que quieres y puedes emprender (no todo el mundo vale), el mejor momento es ayer.
Discrepo ligeramente de la opinión generalizada. Que haya más o menos trabas administrativas nunca hará que nuestro proyecto tenga más o menos éxito y sea más o menos sostenible (económicamente) en el tiempo. ¿En realidad nos soluciona tanto poder crear una empresa en dos días? ¿La diferencia entre adelantar el IVA hará que nuestra caja nos ahogue? Puede que en algunos casos sí, pero la mayoría de las veces se anteponen esas excusas al esfuerzo y la constancia de llevar los proyectos adelante. Un emprendedor debería utilizar todas sus energías en “hacer”, más que en “pensar si puedo hacer”.
Las empresas son el agente que más riqueza crea en una sociedad. Por ello su implicación puede ser mucho más decisiva que las subvenciones. Si las grandes empresas apoyan a emprendedores verdes, sin humo, sin publicidad, entre todos crearán un futuro más verde.
“No son tan importantes las ideas, sino los emprendedores que logran el éxito de un proyecto”En España está habiendo una revolución en el sector del emprendimiento verde, con iniciativas como la Red emprendeverde de la Fundación Biodiversidad, eventos como Greenweekend, el programa de aceleración e incubación de ecoemprendedores de Incubaeco, etc. Por otro lado, hay iniciativas de fomento de proyectos de ciudades inteligentes (“smart cities”), de economía social, de energías renovables y tecnologías limpias (“cleantech”), entre otros, que pudiendo no ser puramente ambientales, están muy relacionados y también aportan al crecimiento del emprendimiento verde en España.
Lo primero venir a un Greenweekend (risas). Hablando en serio, lo primero es plantear el modelo de negocio y testearlo con clientes reales. Hay que asegurarse de que el producto/solución encaja en el mercado y cubre una necesidad por la que el cliente está dispuesto a pagar. Parece de sentido común, pero es lo que más cuesta entender al principio y en lo que nos centramos en Greenweekend. Los más de 40 proyectos que han pasado por nuestros eventos han visto que su modelo de negocio ha conseguido una solidez que en muchos casos ha marcado la diferencia para su viabilidad.
Hay muchas oportunidades y cada uno debe centrarse en lo que más conozca. Ahora hay mucho interés en la economía colaborativa, la agricultura sostenible y urbana, la eficiencia energética, nuevas tecnologías y medio ambiente, ciudades inteligentes, reciclaje y gestión de residuos, etc. Deberíamos repensar los modelos de negocio tradicionales. El medio ambiente puede y debe ser rentable y nuestro reto es encontrar los modelos de negocio que lo hagan posible, con independiencia del sector.
Por lo general, no son tan importantes las ideas, sino los emprendedores que logran el éxito de un proyecto. Desde Greenweekend hemos impulsado muy buenos emprendedores con proyectos e ideas en crecimiento y a los que auguramos mucho éxito:
- Stovo: alfombra calefactable que ofrece confort térmico en zonas determinadas y reduce el gasto energético de los hogares.
- Mibolsa.org: eliminará todas las bolsas de plástico de una ciudad.
- Raymusgo.com: una marca de calzado sostenible y de diseño urbano respetuoso con el medio ambiente. Se venderá a través de zapaterías y tiendas on line.
- EIIR Motors: plantea una furgoneta impulsada por aire comprimido.
Buscar un modelo de negocio rentable y escalable. Si se queman más recursos para “crecer” de lo que se ingresa, no se tiene un modelo claro. El emprendedor debería pivotar hacia otro modelo de negocio (de media se cambia hasta 2,7 veces en los primeros años) y lograrlo antes de agotar todos sus recursos.
Pueden ocurrir dos cosas: que el emprendedor obtenga inversión externa o que no consiga, no necesite o decida no buscar financiación de terceros. En el primer caso un inversor requerirá que el emprendedor comience a tener una estructura profesional (más parecida a una empresa tradicional) para gestionar el rápido crecimiento que se prevé obtener al escalar el modelo de negocio. En el segundo caso será mejor optar por un crecimiento orgánico que permita al proyecto asumir el crecimiento a medida que se obtienen resultados. Para que un emprendedor en fase de crecimiento tenga éxito es fundamental que el equipo mantenga el empujón emprendedor inicial y que además cuente con un equipo de gestores profesionales (financieros, recursos humanos, etc.).
Para los emprendedores que dejan de ser “hombres orquesta” que gestionan todo es fundamental aprender a delegar y centrarse en la gestión de la empresa. Una de las prioridades al crecer será incorporar nuevos miembros al equipo. Alguien que profesionalice está función será esencial. Además se deben controlar mejor que nunca los flujos de caja para no quedarse sin “gasolina” demasiado pronto.
El principal error suele ser que el emprendedor “asuma” que ya está en fase de crecimiento y en realidad no tenga un modelo de negocio sólido. Empezará a consumir muchos más recursos económicos de los que puede generar, y su proyecto fracasará rápido. Antes de crecer es fundamental la validación del cliente y la forma de obtener ingresos, pero hasta conseguirlo, la caja es clave. Durante los primeros pasos del proyecto tiene que asumir que, si no cuenta con inversión, deberá generar caja con actividades que pueden no estar en su modelo y que no sean tan “cool”, como la consultoría, el desarrollo web, etc.
