Un equipo internacional de científicos ha puesto en marcha un ambicioso proyecto para transformar la información genética de cada especie de planta o animal del planeta en códigos de barras y crear la mayor base de datos de este tipo. Menos de una quinta parte de los estimados 10 millones de especies de plantas y animales que hay en el mundo ha recibido nombre.
Los científicos tomarán segmentos de ADN de todas las especies conocidas de la Tierra y los vincularán a fotografías, descripciones e información. «Hemos descubierto que es muy posible disponer de una pequeña secuencia de ADN que caracterice a casi todas las formas de vida en el planeta», asegura Richard Lane, del Museo de Historia Natural de Londres, quien cree que la identificación genética estandarizada de plantas y animales acelerará el descubrimiento de nuevas especies.
Las técnicas actuales que se usan para identificar diferencias entre especies son complejas, consumen mucho tiempo y requieren de conocimientos especiales. «Estamos buscando nuevos métodos que permitan a casi todos, en cualquier parte del mundo, reconocer organismos sin los recursos disponibles para expertos específicos», indica Lane.
«Nuestra misión es desarrollar códigos de ADN como una herramienta científica para la identificación rápida de especies», apunta Scott Miller, del Instituto Smithsonian de EE.UU. y responsable del consorcio de museos, zoológicos y agencias gubernamentales que ha lanzado este proyecto.
La información recopilada podrá utilizarse también para identificar agentes patógenos, portadores de enfermedades, plagas y para vigilar a las especies en vías de extinción.
Está previsto que para 2010 se haya proporcionado códigos para las 10.000 especies de aves conocidas, los 23.000 tipos de peces de mar y agua dulce, y las 8.000 variedades de plantas en Costa Rica y América Central.