Cada año, más y más empresas de cosmética y cuidado personal se suben al carro de lo natural con productos de inspiración verde: aceites supuestamente orgánicos, champús con extractos naturales, cremas hidratantes con aceite de oliva… Después de un paseo por los pasillos de cualquier establecimiento comercial parece que casi todo es natural. Pero las apariencias engañan. A diferencia de lo que ocurre con la alimentación,los términos “natural” o “ecológico” no están protegidos en cosmética. En las siguientes líneas veremos qué es un cosmético natural, los certificados de estos productos en la Unión Europea, sus componentes y su efectividad.
Cosmética natural: sin ley, pero sí certificados
«La ley solo prohíbe engañar a los consumidores, pero como no está definido oficialmente qué se considera una cosmética natural o ecológica, cada empresa puede aplicar sus propios criterios», explica Montse Escutia, coordinadora de Red Estética y secretaria de la Asociación Vida Sana. Así, una marca puede incluir un 1 % de aceite de oliva ecológico y poner en la etiqueta «hidratante de aceite de oliva ecológico», aunque el resto de componentes sea pura química: es lo que se conoce comogreenwashing, una técnica de marketing que hace que el consumidor perciba como naturales productos que en realidad no lo son. Para tener una idea más precisa, basta con mirar la lista de ingredientes y comprobar en qué lugar aparece un componente cualquiera: aquellos con mayor porcentaje van al principio.
A pesar de los avances de los últimos años, a día de hoy no existe una legislación europea que detalle los requisitos a cumplir (origen de los ingredientes, porcentajes mínimos, normas de etiquetado, etc.) para que un producto pueda denominarse natural o ecológico. Ante la falta de normativa fueron surgiendo en Europa múltiples certificados de organismos privados (Ecocert, Natrue, Soil Association, Cosmebio, BDHI, ICEA, Vida Sana…), hasta que cinco de ellos unificaron criterios en 2010 en torno alestándar común Cosmos.
Estos sellos especifican los porcentajes mínimos de ingredientes naturales y ecológicos, además de garantizar la ausencia de transgénicos, parabenos, nanopartículas, siliconas y colorantes y perfumes sintéticos, entre otros componentes potencialmente tóxicos para la piel o el medio ambiente. Son estos logos los que debemos buscar en los envases para saber con certeza si son de verdad naturales o pura estrategia comercial. La mayoría de las compañías españolas de cosmética econatural disfrutan del sello BioVidaSana, un aval que pasó de certificar a 10 empresas en 2014 a 75 en la actualidad.
Comercios especializados
Aunque la cosmética natural puede encontrarse en los grandes comercios, la variedad disponible es escasa y en su mayoría proviene de otros países. Los comercios especializados, así como las cadenas de venta de alimentos ecológicos, disponen de una gama más amplia. Pero antes de comprar es importante asegurarnos de que son productos certificados.
Muchas pequeñas y medianas empresas de cosmética econatural utilizan ingredientes locales, según se desprende de un estudio de la agencia de marketing Mintel. Algunas cultivan sus propios ingredientes y hay incluso marcas que han sido creadas por agricultores con cultivos de lavanda, olivos, árnica, etc. para darle un valor añadido a sus producciones.
Cosméticos naturales, ¿más efectivos que los convencionales?
¿Y son más efectivos los cosméticos naturales que los sintéticos? Ambos tipos de cosmética son válidos. Dependerá del efecto que busquemos y de cada persona.
Los jabones, champús, hidratantes o dentífricos naturales son tanto o más efectivos que los convencionales. En otros casos, no tanto. Los pintalabios no duran tanto porque las ceras naturales no se fijan tanto como las sintéticas (aunque a cambio tampoco resecan tanto los labios), y como no se pueden conseguir todos los colores con pigmentos naturales, estos son menos luminosos.
Los tintes de pelo son un mundo aparte. Los convencionales eliminan por completo la coloración natural del cabello y son tratamientos muy agresivos. Los ecológicos cubren el cabello con pigmentos naturales y el resultado es una mezcla de tu color natural y el del pigmento. Nunca conseguiremos un rubio platino con tintes ecológicos, pero eso sí, el cabello estará más sano. «Es cuestión de enfocar la belleza de otra forma», sostiene Escutia. «Entender que la belleza interior es la que más bellas nos hace estar por fuera. Y tener claro que hay factores con mayor impacto sobre nuestra piel, uñas o cabello como la alimentación, la hidratación, la respiración o el deporte», apunta.
¡No hay que olvidarse de comer bien!
La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano, y con frecuencia refleja el estado interior. De nada sirve usar cosméticos o recurrir a las tecnologías más avanzadas para mejorar nuestro aspecto, si no llevamos una dieta sana y equilibrada, porque el efecto que conseguiremos será mucho menos duradero. Entre otros consejos, los expertos recomiendan evitar el alcohol y los alimentos ultraprocesados y disminuir la proteína animal, las vísceras, el azúcar, la bollería industrial y las grasas trans, además de consumir productos locales y de temporada.
Los ingredientes naturales que triunfan
Sin ser una lista exhaustiva, estos ingredientes naturales y sus propiedades están presentes en muchos productos:
- Aloe vera. Contiene vitaminas (A, B2, C, ácido fólico), minerales (calcio, magnesio, hierro o potasio), aminoácidos, monosacáridos, polisacáridos y muchos otros. Beneficios/usos: es hidratante (si va acompañado de un emoliente), refrescante, antiinflamatorio y bactericida y resulta eficaz con las picaduras de insectos, para cicatrizar las heridas y sanar quemaduras solares leves.
- Aceite de oliva. Contiene vitamina E, polifenoles y ácido oleico. Beneficios/usos: fortalece el cabello, protege las pieles sensibles (como en casos de dermatitis atópica o psoriasis), es hidratante y actúa como desmaquillante natural.
- Manteca de karité. Contiene vitaminas A, E y F. Beneficios/ usos: previene el envejecimiento de la piel y el cabello, es hidratante y cicatrizante, emoliente y antiinflamatoria, además de tener propiedades relajantes.
- Lavanda. Contiene aceites esenciales, taninos y saponinas. Beneficios/usos: la lavanda posee un efecto relajante. Calma las rojeces de la piel y es idóneo para el cabello. Mezclando su aceite esencial con agua, obtenemos un buen repelente natural.
- Rosa mosqueta. Contiene ácidos grasos esenciales (ácido omega 6, omega 3, linoleico), antioxidantes y vitaminas A, C y E. Beneficios/usos: excelente cicatrizante, retrasa el envejecimiento de la piel, es un antiinflamatorio y ayuda a eliminar las manchas en la piel.