“Sí, se reciclan”. Con este eslogan, la Asociación para el Reciclaje de Lámparas (Ambilamp) pretende animar a los consumidores a que depositen sus bombillas usadas en alguno de los más de 9.000 puntos de recogida de estos residuos en toda España. Los consumidores están cada vez más concienciados de las ventajas medioambientales de este gesto, pero hay que seguir con el esfuerzo. David Horcajada, director de marketing de Ambilamp, señala que en 2010 recogieron casi 13 millones de lámparas, un 11,5% más que el año anterior, pero esperan mejorar sus cifras todavía más en 2011.
“Reciclar el vidrio de una bombilla evita el equivalente a las emisiones de CO2 de un coche en un día y medio”Al contrario, los consumidores están muy sensibilizados con el reciclaje de bombillas de bajo consumo. De hecho, la campaña nace de la demanda de más puntos de recogida por parte de los ciudadanos.
Hemos puesto en marcha la extensión de nuestra red de recogida en todo el territorio nacional, un proyecto en el que estamos inmersos desde el año pasado. La campaña se basa en la instalación de contenedores para la recogida de residuos de lámparas en los comercios que venden estos productos: ferreterías, tiendas de iluminación, supermercados, etc. De esta forma, los consumidores tienen a su alcance contenedores de Ambilamp para depositarlos de manera cómoda cuando se dirijan a un establecimiento para adquirir una nueva lámpara.
“Los consumidores están muy sensibilizados con el reciclaje de bombillas de bajo consumo”La campaña sigue en marcha este año y hasta el momento los resultados son muy positivos. En 2010 instalamos más de de 9.000 puntos de recogida en toda España. Si contamos lo recogido en estos puntos y lo acumulado en otros donde hay contenedores grandes, hemos recogido casi 13 millones de lámparas (1.903 toneladas de residuos). Estas cifras suponen un incremento del 11,50% con respecto a las del año anterior. Para el presente ejercicio esperamos mantener esta tendencia ascendente gracias, entre otros factores, a la ampliación de nuestra red de recogida.
Reciclar las bombillas de bajo consumo y fluorescentes aporta notables beneficios al medio ambiente. Según un estudio realizado por la consultora ERM Iberia para Ambilamp, el reciclado del vidrio de una sola lámpara evita la emisión de diez kilos de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, el equivalente al emitido por un coche durante un día y medio. Desde el inicio de nuestra actividad, hemos reciclado más de 47 millones de lámparas. Por tanto, hemos evitado la emisión de más de 470.000 toneladas de C02.
“El mercurio se traslada a Minas de Almadén, donde se reutiliza en distintas aplicaciones”Las bombillas de bajo consumo, los fluorescentes y las lámparas de descarga tienen cuatro fracciones reciclables: vidrio, metal, plástico y mercurio. Ambilamp recoge los residuos de lámparas y los traslada a cuatro plantas de reciclaje ubicadas en Bilbao, Barcelona, Sevilla y Valencia. A cada una de ellas se les da el siguiente uso:
- Vidrio: fabricación de frasquería, cementos y cerámicas.
- Metal: se utiliza de nuevo en la industria siderúrgica en la fabricación de cualquier objeto de metal.
- Plástico: se destina a cualquiera de las múltiples aplicaciones de plástico reciclado.
- Mercurio: se traslada con toda la seguridad necesaria a Minas de Almadén, donde se reutiliza en distintas aplicaciones, como la de agente químico reactor en plantas desaladoras en los procesos de hidrólisis del agua para obtener, entre otras cosas, agua para regadío.
No disponemos de datos desglosados por tipo de lámparas, pero se puede afirmar que por el momento se reciclan más fluorescentes que bombillas de bajo consumo. Sin embargo, tras el aumento de este tipo de bombillas en los hogares, se ha incrementado el volumen de sus residuos. Creemos que las cifras de ambos tipos se equilibrarán en un futuro no muy lejano.
“Por el momento, se reciclan más fluorescentes que bombillas de bajo consumo”Todos los puntos de nuestra red de recogida figuran en un mapa disponible en nuestra web. El sistema de localización se basa en Google Maps y su información se actualiza cada semana.
Es muy difícil equivocarse porque el diseño del contenedor bicaja facilita la separación de ambos tipos de lámpara. Se diferencia por colores (naranja para las bombillas de bajo consumo y verde para los fluorescentes) y cuenta con dibujos que ayudan a identificarlas. Los contenedores tienen un sistema de frenado para que las lámparas no se rompan cuando los consumidores las depositen. Aún así, en la planta de reciclaje, el personal especializado comprueba y separa los residuos antes de comenzar el proceso de separación de los componentes (vidrio, metal, plástico y mercurio).
“Nuestra red de recogida figura en un mapa disponible en nuestra web”Los contenedores específicos para bombillas de bajo consumo y fluorescentes son necesarios por el tipo de residuos que albergan. Hay una normativa que obliga a recoger los residuos de los aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) de forma selectiva para darles un tratamiento sostenible. Como Sistema Integrado de Gestión (SIG), nos encargamos de la recogida de las lámparas (bombillas de bajo consumo, fluorescentes y lámparas de descarga) y de su posterior traslado a las plantas de tratamiento para su reciclaje.
Los comerciantes acogen de forma muy positiva nuestro servicio, ya que pueden contar con contenedores para la recogida de residuos de lámparas en su establecimiento sin coste añadido y conceder a sus clientes un servicio nuevo.
