Los neandertales se extinguieron en la Península Ibérica porque no pudieron soportar el frío. Así lo dice un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Granada (UGR), que pone en entredicho la teoría de que estos pobladores no pudieron imponerse al homo sapiens. La nueva investigación se basa en los registros obtenidos en la cueva de Gorham (Gibraltar).
El homo sapiens cruzó de África a Europa hace unos 30.000 años. Unos 5.000 años después, el neandertal (homo neanderthalensis) desaparecía.
Según el estudio del CSIC y la UGR, las poblaciones neandertales sufrían variaciones ligadas a causas climáticas antes de que los primeros homo sapiens llegaran a la Península Ibérica.
Las épocas menos propicias para la comunidad neandertal eran las de clima frío, árido y de alta variabilidad climática, y las condiciones que tuvieron que afrontar en el sur de la Península hace 24.000 años «fueron las más difíciles de los últimos 250.000 años».
Los autores de la investigación destacan que sus hallazgos echan por tierra el enfoque científico actual que atribuye a los homo sapiens la extinción de los neandertales. Por ello, dicen, puede considerarse una contribución a una nueva corriente científica que imputa a factores ambientales el aislamiento y, posiblemente, la extinción del homo neanderthalensis.