El Gobierno ha dado luz verde a la Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia 2007-2012-2020, que configura el marco con el que pretende cumplir el Protocolo de Kioto y avanzar en la disminución de las emisiones que producen el cambio climático.
La estrategia, informada favorablemente por el Consejo Nacional del Clima la pasada semana, recoge 198 medidas y 75 indicadores para su seguimiento. Las medidas se agrupan en dos áreas: cambio climático, con once áreas de actuación, y energía limpia, con cuatro áreas. Se incluye un plan de medidas urgentes que recoge más de 80 actuaciones incluidas las integradas en el Plan de Acción 2008-2012. Este plan supondrá una inversión cercana a los 2.400 millones de euros.
El capítulo de cambio climático abarca un amplio paquete de medidas que incluye la cooperación institucional, los mecanismos de flexibilidad, el comercio de derechos de emisión, la captura y almacenamiento de CO2, la adaptación al cambio climático, actuaciones de difusión y sensibilización, y la investigación, desarrollo e innovación tecnológica.
El relativo a energía limpia pretende reducir paulatinamente la intensidad energética en España. Establece como áreas de actuación la eficiencia energética, energías renovables, gestión de la demanda, investigación, desarrollo e innovación en el desarrollo de tecnologías de baja emisión de dióxido de carbono.
El plan de medidas urgentes afecta a siete sectores y gases distintos y suponen la puesta en marcha inmediata de alrededor del 65% de las medidas de reducción de emisiones enumeradas en la estrategia. Con la reducción de emisiones ya iniciada y las nuevas iniciativas, se reduce en un 60% la distancia al cumplimiento de las obligaciones de España en el Protocolo de Kioto.