El Consejo de Ministros ha aprobado revisar el contenido del Real Decreto que regula el listado y el catálogo de Especies Exóticas Invasoras, «con el fin de hacerlo viable y dar seguridad jurídica a una materia cuya regulación es imprescindible». El Ejecutivo señaló que esta decisión atiende las inquietudes del conjunto de las comunidades autónomas que, en sucesivas reuniones con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, «han advertido de los problemas e indefiniciones jurídicas que el actual Real Decreto ha mostrado en su aplicación desde su entrada en vigor el pasado 13 de diciembre».
Según el Gobierno, la norma, además de contener importantes indefiniciones jurídicas que dificultan su aplicación, incorpora un listado de especies potencialmente invasoras a las que aplica un régimen muy restrictivo, que afectaría a especies como la carpa o la trucha arco iris, integradas desde hace más de un siglo en el ecosistema español.
En el ámbito vegetal, el listado incluye un importante número de especies comúnmente utilizadas en jardinería y ampliamente extendidas en las ciudades y urbanizaciones, como el césped común, los almendros o los madroños en las Islas Canarias, o ciertos tipos de acacias, geranios y rosales en todo el territorio nacional. «Todo esto ha provocado la imposibilidad material de aplicar la controvertida norma sin provocar situaciones tan anómalas como tener que declarar a las autoridades la tenencia de un carpín rojo a título de mascota», dijo el Ejecutivo.
Esta situación de conflictividad ha provocado que el Real Decreto se encuentre ya recurrido en el Tribunal Supremo, entre otros, por la Federación Española de Pesca. A su vez, Castilla y León, Aragón y Cataluña han remitido al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente requerimientos previos a la interposición del correspondiente recurso contencioso-administrativo para solicitar el reconocimiento de la actual nulidad de la norma, que parcialmente ha sido estimada por el Consejo de Ministros.
El Gobierno adelantó que establecerá «de forma consensuada con las administraciones autonómicas competentes», un nuevo marco regulador que refuerce el control y la erradicación de las especies exóticas invasoras que supongan una amenaza grave para el medio natural, «en sintonía con el respeto a las actividades económicas y tradicionales como la caza y la pesca recreativa».