El teléfono móvil de Apple, el iPhone, contiene materiales y sustancias peligrosas. Lo dice un informe de Greenpeace, que lamenta que la empresa de Steve Jobs, pese a su compromiso con el medio ambiente, siga utilizando sustancias nocivas en sus productos.
Para la elaboración del informe «Llamada perdida: las sustancias peligrosas del iPhone», un laboratorio científico analizó 18 componentes externos e internos del aparato. Los investigadores confirmaron la presencia de compuestos bromados en la mitad de las muestras, incluida la antena, que constituye el 10% del peso total del tablero de circuito flexible. Además, el PVC que recubre los cables de los auriculares está constituido en un 1,5% de esteres de ftalato.
La batería, por su parte, está inusualmente pegada y soldada al teléfono. Esto impide su reemplazo y dificulta su separación para reciclarla, o gestionarla adecuadamente, «aumentando el impacto que provocan los residuos electrónicos», advierten los ecologistas.
Productos «verdes»
Los datos de este informe sugieren que Apple no está haciendo los progresos necesarios para alcanzar su compromiso de eliminar el uso de compuestos bromados y PVC para finales de 2008.
«Steve Jobs ha perdido la oportunidad de hacer del iPhone el primer paso hacia productos Apple más verdes», señala Sara del Río, responsable de la campaña de Tóxicos de la organización ecologista en España. «Parece que Apple está lejos de encabezar el avance, como ya lo está haciendo Nokia, cuyos teléfonos móviles no contienen PVC», añade.
David Santillo, coordinador del informe, declara que «dos de los plastificantes de ftalato encontrados en altos niveles en los cables de los auriculares están clasificados en la UE como ‘tóxicos para la reproducción’, dada su conocida capacidad de interferir en el desarrollo sexual de los mamíferos. Aunque no están prohibidos en teléfonos móviles, estos ftalatos están prohibidos en todos los artículos infantiles que se venden en la UE. Apple debería eliminar estas sustancias de todos sus productos».
Esta no es la primera vez que Greenpeace detecta peligros ocultos en los aparatos de Apple. La organización descubrió con anterioridad retardantes de llama bromados y PVC en algunos componentes del iPod y del ordenador portátil Macbook Pro.