El mal estado de la mar impidió ayer que un equipo formado por cinco expertos capturara a un tiburón gris hembra de 1,6 metros de longitud que ronda cada día la playa del Miracle (Tarragona). La intención es trasladarlo al Acuario de Barcelona, en cuyas instalaciones existen ejemplares de su misma especie.
El dispositivo para capturar al animal se montó sobre las 7:30 horas y se desmontó a las 14:00. El escualo apareció brevemente sobre las 11:00 de la mañana pero no pudo ser capturado en ese momento. Los encargados de esta tarea volverán a intentarlo durante todo el día de hoy.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Tarragona mantiene la prohibición de bañarse en la playa del Miracle, donde patrullan agentes de la Guardia Urbana, especialmente en el tramo al que el tiburón tiene costumbre de acudir.
La concejala de Medio Ambiente, Carme Crespo, señaló que los pescadores del barrio tarraconense del Serrallo ya han visto antes muchas veces tiburones de este tipo, «aunque no tan cerca de la costa».
El tiburón gris «no es peligroso», aunque, como medida de precaución, se ha cerrado la playa al baño en la zona cercana a las rocas hasta que se le encuentre. Según Crespo, en todo el mundo sólo se han registrado cuatro casos de ataques de esta especie.
Los técnicos del Acuario de Barcelona que tratan de dar caza al escualo dicen que han descartado dormir al ejemplar porque desconocen su peso, y han optado por la técnica de extender una red en forma de embudo. Una vez dentro, lo trasladarán a una furgoneta habilitada con un tanque de agua.