Las medidas necesarias para evitar una degradación irreversible del medio ambiente costarían menos del uno por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
En un informe, titulado «Perspectivas del Medio Ambiente» la OCDE advierte que «para evitar daños irreversibles en los próximos 20 años es indispensable que los gobiernos modifiquen sin retraso sus políticas en un cierto número de terrenos identificables».
La organización afirma que «con la supresión de las subvenciones existentes en los países de la OCDE, con la aplicación de un impuesto sobre la energía vinculada al contenido en carbono de los combustibles y con la tasación de todos los productos químicos, se podrían lograr en 2020 mejoras no menospreciables respecto a la hipótesis del mantenimiento del statu quo» medioambiental.
Los autores del informe señalan que los problemas medioambientales más preocupantes para los países de la OCDE son «la explotación no viable de los recursos naturales, la degradación de los ecosistemas y la perturbación de los sistemas medioambientales que constituyen el medio vital».
En el informe enumeran la sobreexplotación de los recursos pesqueros, la deforestación en las regiones tropicales, el cambio climático vinculado a las emisiones de dióxido de carbono, el deterioro de la calidad del aire en las zonas urbanas, el aumento del consumo de energía en los transportes (un 35 por ciento hasta 2020) o la contaminación con azufre de las aguas subterráneas.