La conservación de algunos de los mayores ríos del planeta podría ser más fácil a partir de ahora gracias al proyecto conjunto de la multinacional IBM y la organización Nature Conservancy, que consiste en una red que conectará la Administración con organizaciones e individuos y les proveerá de información detallada sobre las amenazas que sufren las grandes vías fluviales mundiales.
Esta red recogerá información sobre los niveles de agua, la erosión y la contaminación, así como datos históricos sobre el clima y las precipitaciones de la región. Una vez que se hayan recogido todos los datos, los usuarios podrán descubrir qué impacto tendrá el desarrollo industrial de la zona en la calidad del agua y el peligro en las reservas de pescado y las personas que dependen de ellas. El sistema proveerá de acceso a una amplia base de datos sobre clima, vegetación y biodiversidad, y permitirá a los actores políticos implicados entender mejor cómo sus decisiones tienen un impacto sobre el ecosistema.
Este proyecto, que comenzará en el río Paraguay-Paraná en Brasil, para más tarde trasladarse hasta el río Yangtze en China y el Mississippi en Estados Unidos, consiste en una simulación, una visualización tridimensional y un escenario virtual que permitirá a los interesados ver de manera casi real cómo es el ecosistema de la zona de los mayores ríos.
Resulta «importante tener fácil acceso a la red y a la información, por ese motivo, parte del proyecto consiste en integrar una base de datos que haga más sencillas las consultas», según señaló la responsable del Área de Innovación Ecológica de IBM, Sharon Nunes. La unión de ambas organizaciones hace «que este proyecto sea posible por primera vez, poniendo especial énfasis en los proyectos locales de mejora de la calidad del agua de los ríos», explicó. Según Nunes, una de las ventajas de este proyecto es la creación de una «red inteligente» que permitirá entender cómo integrar alternativas energéticas como la eólica o la solar en la red de suministro. «Uno de los objetivos de este proyecto será explicar cuál es la mejor manera de adaptar nuestra estructura energética a través de las nuevas tecnologías», explicó.
«La escasez de agua se está convirtiendo en una crisis mundial, especialmente para las comunidades en desarrollo», aseguró por su parte el director de Nature Conservacy, Steve McCormick. La unión con IBM representa para la organización medioambiental «un avance necesario para preservar los sistemas acuáticos de una forma global», agregó.