El río Yangtsé, el más largo de Asia, sigue gravemente afectado por la contaminación. El primer estudio gubernamental sobre sus condiciones medioambientales revela que lejos de disminuir, la contaminación del curso fluvial sigue creciendo y ya hay 600 kilómetros en estado «crítico».
Este trabajo, elaborado por la Academia China de Ciencias, la Comisión de Recursos del Yangtsé, el Ministerio de Recursos Hidráulicos y la organización ecologista WWF, revela que el río recibe cada año 14.200 toneladas de agua contaminada, equivalentes al 42% del total desaguado en todo el país. Pesticidas, fertilizantes y escapes de los barcos de pasajeros figuran entre los principales contaminantes, especialmente en la zona de la presa de las Tres Gargantas.
Toda esta contaminación está afectando significativamente a la vida acuática, tanto en su vertiente medioambiental (extinción de especies como el delfín de aleta blanca) como económica, dado que actualmente se extrae cuatro veces menos pescado y otros productos que hace 50 años.
El estudio indica además que el 30% de los afluentes del Yangtsé están «gravemente contaminados», entre ellos grandes corrientes como el Min, el Tuo, el Xiang o el Huangpu, que pasa por la ciudad de Shanghai.
Por otro lado, habla de un posible aumento en el futuro de los riesgos de desastres naturales por crecidas del río, que actualmente es ya el causante de más del 70% de las inundaciones que sufre China cada año.