Las conclusiones de un nuevo mapa mundial publicado por el Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea señalan que el 95% de la población terrestre vive únicamente en el 10% de la superficie. Además, más de la mitad de la población mundial vive ya a menos de una hora de una gran ciudad y tan sólo el 10% de la superficie terrestre está a más de 48 horas de distancia de un centro urbano, según este trabajo.
A pesar de ello, se registran grandes diferencias entre los países en vías de desarrollo y los desarrollados. En el mundo desarrollado, el 85% de la población vive a menos de una hora de una ciudad, mientras que en los países en desarrollo, donde la cantidad de metrópolis es menor, el porcentaje no supera el 35%.
No obstante, parte de esta diferencia se puede achacar a que las personas que se desplazan diariamente hasta su puesto de trabajo en los países desarrollados disponen de ventajas como, por ejemplo, mejores carreteras y un transporte público más rápido. En los países en desarrollo, los trabajadores han de utilizar medios de transporte más lentos como caminar, la bicicleta o autobuses ineficientes cuyas rutas discurren por carreteras precarias.
El acceso a las áreas urbanas implica también la oportunidad de disponer de parte de la mejor oferta cultural, educativa y sanitaria. Las áreas urbanas también proporcionan trabajo y funcionan como centros de comunicación y transporte. Como contrapartida, las áreas vírgenes del planeta son ahora menos remotas que nunca. La densidad de población en Europa es especialmente alta. «Apenas existen espacios salvajes», declaró Alan Belward, del JCR.