El temporal de nieve y hielo colapsó ayer buena parte de las comunicaciones por carretera de la mitad norte y el centro peninsular. Las previsiones apuntan a que la ola de frío polar continuará al menos hasta el lunes, por lo que el director general de Tráfico, Carlos Muñoz-Repiso, aconsejó a los conductores que «se piensen dos veces la necesidad de ponerse en carretera» durante el fin de semana. «Lo normal es que lleguen a su destino, pero invertirán el doble de tiempo y la situación puede entrañar peligros e incomodidades», dijo.
En el País Vasco, la nieve hizo prácticamente imposible el tránsito por las vías secundarias y la red principal sufrió cortes intermitentes. Varios camiones se quedaron cruzados, a pesar de que el Gobierno vasco había prohibido el tráfico de vehículos de más de 7.500 kilogramos. Los problemas más graves se concentraron en la N-I, entre Alsasua y Vitoria, con colas kilométricas provocadas por salidas de calzada, múltiples golpes de chapa y más de un tijeretazo de camiones de gran tonelaje.
En Navarra, donde el temporal sólo afectó a la red secundaria, el centro de coordinación del plan de vialidad invernal suprimió temporalmente la prohibición a los camiones. El buen estado general de las principales carreteras llevó al órgano conjunto a levantar la suspensión a las 10:30 horas.
Nieve en las playas
En Asturias, la nevada llegó al mar y pudo verse en las inmediaciones de Gijón. Unas 60 localidades quedaron aisladas por carretera. Numerosos colegios no abrieron sus puertas y los que sí lo hicieron pidieron a los padres que fueran a recoger a sus hijos dado que el temporal arreciaba con fuerza conforme pasaban las horas. En Oviedo, dos personas resultaron heridas leves al caerles encima una marquesina, que se hundió a consecuencia de la nieve acumulada. Los autobuses urbanos de la capital suspendieron su servicio dado el mal estado de la calzada.
En Galicia, unos 6.000 escolares, en su mayoría de Lugo y Orense, tuvieron vacaciones al no poder acudir a clase. La nieve azotó con fuerza esta región, aunque conforme avanzó la jornada se abrieron grandes claros. Una situación similar se vivió en la Cataluña central, donde continuó nevando durante toda la madrugada del viernes. Sin embargo, la apertura de claros permitió la limpieza de calles y calzadas.
Puertos cerrados o con cadenas
En el centro peninsular, la nieve cayó intensamente en Castilla y León, donde ciudades como Ávila, Burgos, León, Soria o Ponferrada amanecieron blancas. Los copos hicieron también presencia en la ciudad de Madrid, aunque no llegaron a cuajar. A primeras horas de la tarde, las cadenas eran necesarias en puntos tan al sur como la circunvalación de Albacete.
Durante la jornada fueron numerosas las salidas de vía de vehículos a consecuencia de la nieve. El siniestro más destacado tuvo lugar en la A-II a su paso por la localidad alcarreña de Alcolea del Pinar (Guadalajara), al colisionar en cadena 15 vehículos. Otras tantas personas tuvieron que ser rescatadas de los coches, por lo que la carretera estuvo cortada durante dos horas.
A última hora de la tarde, la nieve tenía cerrados al tráfico una treintena de tramos de carretera y puertos de montaña. Además eran necesarias las cadenas en otros 70 puntos de la red.