La Comisión Europea ha propuesto hoy prohibir en aguas comunitarias la captura de tiburones para hacerse con sus aletas, codiciadas en el mercado internacional, y devolver al mar el resto de la carne del animal, de precio modesto y de difícil conservación.
Esta práctica, denominada «finning» en la jerga pesquera, supone una grave amenaza para los recursos de tiburones, que se encuentran en mucho casos bajo la amenaza de la extinción, explica el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
La propuesta, que deberá ser examinada por los ministros de Pesca de los Quince, supone adoptar un reglamento en el que se prohíba practicar el «finning» en todas las aguas comunitarias y a toda la flota europea, incluso cuando ésta faene en caladeros ajenos a la Unión Europea (UE).
Dada la dificultad de identificar a la especie a partir de la aleta, el reglamento perseguiría la extracción de aletas no sólo de tiburón, sino de cualquier tipo de pescado elasmobranquio, como rayas, quimeras o torpedos.
Sólo se permitiría seccionar la aleta cuando la captura se conserve íntegramente a bordo del buque, en el marco del proceso para explotar óptimamente todas las partes. Las autoridades nacionales establecerán y gestionarán la concesión de permisos especiales de pesca con este fin.
Asimismo, los pescadores que hagan uso de esta licencia estarán obligados a registrar datos pertinentes sobre sus capturas para asegurar que la extracción de las aletas se realiza conforme al reglamento.
Actualmente, según Bruselas, existe una fuerte demanda internacional de aletas de tiburón. No obstante, precisa que el «finning»no se explica tanto por esta demanda como por el hecho de que el resto de la carne del escualo se cotiza a precios más bien modestos y a que su conservación a bordo suscita numerosos problemas prácticos.
El reglamento propuesto se integraría en un futuro plan de acción de la UE para la conservación y el uso sostenible de los tiburones, de acuerdo con el código de conducta para una pesca responsable y con el plan de acción internacional para los tiburones, ambos de la Organización de las Naciones Unidas para la Pesca y la Alimentación (FAO).