Un equipo de científicos de la Universidad de Málaga (UMA) trabaja en el desarrollo de nuevas propiedades aplicables a la obtención de absorbedores solares con alta eficiencia en la captación solar. Los materiales cuya funcionalización se proponen son tanto metales como plásticos. Andalucía Investiga ha informado que por el momento han obtenido resultados parciales, como el empleo de un tipo de material denominado cermet, compuesto por cerámica y metal.
El proyecto, dirigido por el profesor de la UMA José Ramos Barrado, tiene como fin diseñar y fabricar un colector con un absorbedor de superficie selectiva solar, con una eficiencia térmica elevada, resistente a la corrosión ambiental, de fácil industrialización y de bajo coste, con la utilización como sustrato metales o plásticos. La iniciativa está enfocado a colectores de uso doméstico y se centra en el absorbedor, uno de los elementos de los captadores o colectores solares, preció Andalucía Investiga.
«El absorbedor capta la energía solar que llega, de manera que se calienta a una temperatura mayor que la ambiental y emite radiación térmica, lo que impide que su temperatura vaya en aumento», explicó Barrado. Por eso se recubre con una capa que tiene como propiedad absorber mucho calor y emitir poco. «La emitencia se puede reducir hasta un 6% o un 7%».
«Ya existen en el mercado dispositivos con estas características, pero la capa que recubre los absorbedores se fabrica fuera de España», señaló el responsable del estudio. Los investigadores de la UMA pretenden fabricar las capas por procedimientos que no requieran una fuerte inversión por parte de la industria y que sean económicamente rentables.
Beneficioso para el medio ambiente
Los científicos trabajan sobre absorbedores de metal y de plástico, para lo cual emplean diferentes técnicas en función del material a tratar. Para el metal utilizarán un procedimiento de bajo coste, el spray pirolisis (romper por calor), por el que se obtiene la capa deseada a partir de la pirolisis química de un precursor que es depositado sobre el metal mediante el spray de soluciones acuosas de dicho precursor. «Se trata de un método económico, fácil de hacer sobre cobre o aluminio e industrialmente barato», explicó Barrado.
Para los absorbedores de plástico se emplea un método llamado magnetron sputtering. Una máquina hace un vacío elevado y por evaporación física se evapora la sustancia que se quiere poner encima del plástico (varias capas). La técnica es cara, pero permite la funcionalización de plásticos al no requerir elevadas temperaturas para la a formación de las capas.
Los responsables del proyecto aseguran que las consecuencias para el medio ambiente de la aplicación de esta tecnología serían positivas, ya que los colectores potencian el empleo de energía solar térmica y fotovoltaica, con lo que harían disminuir el consumo de otro tipo de energía más contaminante. Además, los métodos de spray pirolisis y magnetron sputtering tampoco son contaminantes.