Las altas temperaturas registradas en el mes de agosto y la humedad generada por las precipitaciones de los últimos días han favorecido la detección de distintas plagas, en especial de cucarachas, en los hogares y en los entornos urbanos. Así lo ha alertado la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA), que ha señalado cómo, además de ser un problema higiénico, las cucarachas pueden ocasionar grandes pérdidas económicas por la contaminación que provocan en alimentos al defecar sobre ellos, lo que ocasiona enfermedades como la disentería y la salmonelosis.
Además de poder contaminar con bacterias los alimentos que comen, el contacto de las personas con las cucarachas provoca alergias que se manifiestan con estornudos, comezón, lagrimeo y escurrimiento nasal. En algunos casos, esas manifestaciones se pueden complicar y ocasionar una crisis asmática debido a que el sistema inmune no responde de forma adecuada, explica ANECPLA.
Las especies más comunes en España son la Blattella germánica, más conocida como la cucaracha rubia, alemana o del café. Mide de 1 a 1,5 centímetros y son de color marrón claro. Otra especie común es la Blatta orientalis o cucaracha negra, que mide de 2 a 2,7 centímetros. Procede habitualmente de la red de alcantarillado y emerge a través de los sumideros. Por último, y desde hace algunos años, otra especie invasora es la Periplaneta americana (cucaracha americana), conocida como la supercucaracha, que habita en zonas cálidas y costeras como Canarias, Levante o la costa andaluza, entre otras zonas. De color rojizo y de gran tamaño (de 3 a 5 centímetros), se ha introducido en nuestro país a través de los barcos llegados a puertos de la zona Mediterránea, extendiéndose hacia zonas urbanas, sobre todo a través de las alcantarillas. En la actualidad está perfectamente adaptada en nuestro país, y pese a que la especie más usual en las viviendas es la alemana y en los jardines la negra, han comenzado a ser desplazadas por la americana.
Para frenar y evitar los problemas derivados de la presencia de cucarachas en nuestro entorno, ANECPLA recomienda eliminar fuentes de humedad y no dejar alimentos o agua sin tapar a su alcance, limpiar los restos de comida de las mesas y encimeras, cerrar bien las bolsas y cubos de basura para evitar olores atrayentes, etc. Es necesario mantener una ventilación adecuada para eliminar olores y temperatura no excesiva y realizar una limpieza periódica de trasteros y otras posibles fuentes de anidamiento. Además, se aconseja corregir las deficiencias estructurales en las casas que permitan la entrada de estas plagas: sellar grietas (fundamentalmente las que se encuentran alrededor de los lavabos, fregaderos y zócalos), supervisar las instalaciones de gas y agua, revisar los desagües.
La Asociación también recomienda a las comunidades de vecinos y a los particulares acudir a un profesional cuando las medidas preventivas no son suficientes. En este caso, ANECPLA recuerda que la empresa tiene que estar inscrita en el Registro Oficial de Establecimientos y Servicios Plaguicidas/Biocidas. El personal técnico debe estar en posesión del carné oficial que le certifique como especialista y los productos utilizados deben estar registrados y autorizados en la por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad.