Los osos polares se están volviendo caníbales debido al calentamiento acelerado del Océano Ártico, que reduce las placas de hielo flotantes y hace su búsqueda de alimento más difícil, según un estudio que será publicado en Estados Unidos.
«Aunque los osos polares pueden matar y devorar a sus congéneres en peleas por hembras o por territorio, es extremadamente raro que se lancen a la caza de otros osos como presa», añadió al investigador, cuyo estudio será publicado en el próximo número de la revista «Polar Biology». En 40 años de estudios científicos sobre los osos polares en el norte de Alaska y Canadá, los expertos nunca habían observado tal comportamiento.
La voz de alarma surgió en el invierno de 2004, cuando se descubrieron tres osos muertos en la zona del mar de Beaufort, cerca de la frontera entre Alaska y Canadá, donde en los últimos años se fundieron grandes extensiones de hielo. Los osos polares de esta región son notoriamente delgados, porque debieron pasar sus veranos en los bancos de hielos, donde hay pocas focas que cazar, o en tierra firme, donde las oportunidades de encontrar comida son aún más limitadas.
El Ártico se recalienta dos veces más rápido que el resto del planeta y sus hielos podrían fundirse completamente alrededor del 2100, según estudios recientes. El número de osos polares se estima hoy en 20.000 ó 30.000 ejemplares.