El pasado 15 de junio nació en el Parque de Rescate de la Fauna Sahariana (Almería) la primera gacela mediante inseminación artificial con semen congelado. La cría, que se encuentra en perfecto estado, pertenece a la especie «Gazella dama mhorr», cuya población ha disminuido de modo drástico desde 1950 por la caza y no se ha visto en libertad en su hábitat, que abarca todo el norte de África, desde 1968. Actualmente sólo quedan 250 individuos, todos ellos en cautividad.
La técnica empleada para lograr el nacimiento de la gacela permitirá paliar la amenaza de la consanguinidad que afecta especialmente «a las poblaciones pequeñas y aisladas, que son más susceptibles a enfermedades y parásitos y a problemas reproductivos», señaló Montserrat Gomendio, investigadora del proyecto Rupex (Reproducción de Ungulados en Peligro de Extinción).
De este modo es posible el intercambio de genes sin necesidad de trasladar a los animales, que frecuentemente «no consiguen integrarse lo suficiente como para reproducirse; además de resultar menos costoso y evitarles el estrés del transporte», agregó Gomendio.
A partir de ahora, según la experta, es posible poner en marcha un banco genético de semen congelado, que dura «50 años o más», con el que mantener la diversidad genética de las especies amenazadas. Así, la criopreservación permite un seguro de vida para muchas especies en declive, ya que el semen de los machos puede utilizarse muchos años después de la muerte del animal. El objetivo es conseguir un «stock» suficiente de individuos que posibilite proyectos de reintroducción de esta gacela en sus áreas originales de distribución, en África.