En este Día Mundial del Medio Ambiente, el lema es claro: es hora de actuar #PorLaNaturaleza. “La variedad de alimentos que comemos, el aire que respiramos, el agua que bebemos y el clima que hace posible nuestra vida en el planeta no existirían sin los servicios de la naturaleza. Para cuidar de nosotros mismos, primero debemos cuidar de ella”, afirman los impulsores de esta iniciativa global que se celebra cada 5 de junio desde 1974. En la edición de 2020, el tema central es la biodiversidad, una riqueza invalorable que estamos perdiendo y que, por tanto, debemos cuidar más que nunca. La reducción del consumo y el uso de materiales sostenibles, como el vidrio, son fundamentales para alcanzar este propósito.
Reciclar es clave para reducir la gran cantidad de desechos que se producen, pero no debería ser nuestra primera opción. El orden de las conocidas como tres erres de la ecología es importante: primero debemos reducir nuestro consumo, después reutilizar esos envases y luego reciclarlos. Aun así, reciclar supone numerosos beneficios ambientales. En las siguientes líneas conoce qué ganamos reciclando envases y, en concreto, con las botellas de vidrio. Pero antes, te contaremos paso a paso el proceso de reciclaje de botellas, un claro ejemplo de economía circular que debemos promover para proteger la salud y la biodiversidad del planeta.
Reciclaje de botellas, el círculo perfecto
El vidrio tiene infinitas vidas. Si se recicla, de una botella sale otra igual. La cadena de su reciclado es un ejemplo de economía circular que traza, por tanto, un círculo perfecto con el siguiente recorrido:
- El proceso comienza en nosotros: hostelería y restauración y consumidor responsable. Somos los protagonistas. El 78 % de los ciudadanos afirma que separa siempre los envases de vidrio, mientras que la hostelería genera el 48 % de los residuos de envases de vidrio de un solo uso.
- Sigue con la recogida selectiva de solo vidrio. En España, contamos con más de 200.000 contenedores, lo que significa que hay uno por cada 230 habitantes.
- Continúa en la planta de tratamiento. Economía circular: el residuo se convierte en recurso. En este caso, los residuos de envases de vidrio se separan, limpian y trituran en pequeños fragmentos.
- Y llegan a la fábrica de envases por y para el medio ambiente. El calcín (vidrio reciclado) se funde para fabricar nuevos envases. Objetivo: evitar emisiones de dióxido de carbono (CO2), reducir el volumen de vertederos y ahorrar energía.
- Después, se pasa al envasador comprometido con la sostenibilidad. Las compañías envasadoras financian el sistema de reciclado con su aportación a través del Punto Verde.
- Comercio y vuelta a empezar. Los nuevos envases regresan al mercado y pueden reciclarse infinitas veces.
Cuántos recursos ahorramos reciclando el vidrio
El reciclaje de este tipo de envases tiene unos efectos muy positivos. Por ejemplo, con la energía ahorrada gracias al reciclaje de 10 botellas de vidrio, se logra:
- Seis cargas de lavadora de una familia de cuatro miembros.
- 300 días de carga para un teléfono de móvil.
- Cuatro días viendo la televisión.
Y el CO2 que evitamos emitir a la atmósfera equivale a:
- 42 kilómetros en motocicleta.
- 15 kilómetros en coche.
¿Y con otros envases? Beneficios de reciclar
Reciclar envases de plástico, latas, briks, papel y cartón supone numerosos beneficios ambientales. En concreto, gracias a casi el millón y medio de toneladas que reciclamos los españoles en 2018, conseguimos:
- ahorrar 1,45 millones de toneladas de materias primas.
- mantener un aire más limpio, pues evitamos que se emitieran 1,6 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera, el equivalente a 8.200 vuelos realizados entre Madrid y Canarias.
- reducir el gasto de energía en 6,21 millones de megavatios/hora y el consumo de agua en 20,3 millones de m3.