Disfrutar del sol, la playa o el monte, pero de forma ecológica y solidaria. Es lo que proponen ONG ecologistas, instituciones y hasta entidades bancarias a través de su gran oferta de programas de voluntariado medioambiental. Especialmente en verano, aunque también durante el resto del año, el voluntario ambiental puede sensibilizar al resto de ciudadanos o ayudar a conservar y recuperar espacios naturales que no reciben a menudo suficientes recursos. De esta manera, se sentirá útil, más realizado y podrá conocer a personas comprometidas con su entorno.
Imagen: Andrew Coyle
SEO/BirdLife es una de las organizaciones veteranas en programas de voluntariado ambiental. En los diferentes campos y grupos de trabajo y en su red de voluntarios se puede, además de conocer varios espacios naturales y su fauna, trabajar en diferentes proyectos de conservación práctica: mejoras del hábitat de especies amenazadas, seguimiento y censos de aves y mamíferos, vigilancia, información a los visitantes o anillamiento de aves.
Por ejemplo, junto a la Fundación EROSKI, SEO/BirdLife organiza un programa que permite entrar en contacto directo con la naturaleza durante el verano en los Parques Naturales de Santoña, Doñana, Delta del Ebro, Monfragüe y Alto Tajo.
WWF/Adena también dispone de una variada oferta. Así, se puede trabajar recuperando zonas degradadas, conservando espacios naturales, sensibilizando a la población sobre la importancia de proteger la naturaleza, restaurando hábitats de especies amenazadas o ecosistemas forestales de alto valor ecológico.
Especialmente en verano, aunque también durante el resto del año, el voluntario ambiental puede ayudar a conservar o recuperar espacios naturalesEn concreto, con WWF/Adena se puede colaborar en lugares tan bellos e importantes ecológicamente como el Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega (Segovia); los islotes de Alegranza y Montaña Clara, los Roques del Este y del Oeste, al norte de la Isla de Lanzarote; la cuenca de la Rocina (Guadalquivir) y río Piedra (Ebro); o el Parque Nacional de Cabañeros (Ciudad Real y Toledo), entre otros.
La organización Ecologistas en Acción ofrece varios programas a través de sus sedes provinciales. Por ello, conviene preguntar en la sede de la localidad en la que vivamos para saber qué ofrecen.
Por ejemplo, en Calahorra se ha organizado, en colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), un proyecto para valorar la riqueza biológica de los últimos reductos del bosque natural de ribera (Sotos), en el valle medio del Ebro; en Cuenca y Toledo, con el apoyo de la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, un programa de formación, sensibilización, recuperación y conservación natural; en la Sierra de Andújar (Jaén), un campo de voluntariado para conservar el lince ibérico; etc. Los responsables de Acciónatura ofrecen desde hace una década diversas acciones en los ámbitos de bosques, ríos, estepas, litoral, humedales, cambio climático y también en la gestión interna de su propia organización. Por ejemplo, los voluntarios pueden restaurar comunidades vegetales, eliminar especies invasoras y mantener replantaciones, limpiar las playas y el fondo marino de Sitges, redactar un informe especializado sobre algún problema medioambiental, etc.
La oferta de la Fundación Global Nature también es muy interesante. Así, se puede colaborar en campos de trabajo en Canarias, La Nava y Palencia, o en programas de prácticas en sus centros de educación ambiental «La Dehesa» o en «Tierra de Campos».
Por su parte, desde la Fundación Oxígeno se proponen también varias posibilidades, como jornadas y encuentros de voluntariado, y diversos programas en Parques Naturales de Castilla y León.
Las diversas instituciones estatales, autonómicas, provinciales y locales cuentan con una gran variedad de programas y ayudas de voluntariado ambiental. El MARM, además de sus programas de educación ambiental impulsa diversas iniciativas. El Programa de Voluntariado en Ríos forma parte de un ambicioso plan de recuperación de estos ecosistemas fluviales que pretende impulsar una red estable de voluntarios en las cuencas hidrográficas intercomunitarias.
Imagen: Rodolfo BelloliEl Organismo Autónomo Parques Nacionales, dependiente del MARM, organiza anualmente diferentes proyectos de voluntariado en Parques Nacionales, Reservas Naturales, Centros y Refugios Nacionales de Caza, con la colaboración de diversas organizaciones. Este organismo cubre los gastos de alojamiento, manutención, transporte dentro de los Parques, seguros y materiales para las diversas actividades. La guía CONSUMER EROSKI de Parques Naturales y Nacionales permite conocer más sobre estos entornos naturales.
Por su parte, los ayuntamientos, diputaciones y gobiernos autonómicos, a través de sus departamentos de Medio Ambiente y/o de la Juventud, son otras opciones a tener en cuenta. Por ejemplo, en las páginas web del Centro de Recursos Ambientales de Navarra (CRANA), de la Junta de Andalucía, de la Diputación de Alicante, del Instituto de la Juventud de la Región de Murcia, etc., se puede encontrar más información en este sentido.
Asimismo, algunas cajas de ahorro, a través de su obra social, también organizan planes de voluntariado ambiental. Por ejemplo, la Caja de Canarias ha puesto en marcha una iniciativa para paliar los efectos de los incendios en esta comunidad, mientras que Caja Mediterráneo (CAM) dispone de varios campos de voluntariado en zonas como Font Roja o la isla de Tabarca, y una goleta que recorre el litoral español para sensibilizar a su población.
En cualquier caso, lo mejor es ponerse en contacto directamente con los responsables de estas instituciones y entidades de la localidad en la que vivamos para conocer los detalles y, en su caso, participar en las actividades.
