Reino Unido ha declarado Área Marina Protegida (MPA) las aguas que rodean a las islas Georgias del Sur y Sándwich del Sur, según ha informado el Ministerio de Exteriores británico. La MPA abarcará más de un millón de kilómetros cuadrados del Atlántico Sur, incluidos 20.000 kilómetros cuadrados de exclusión pesquera, lo que equivale al cuádruple de la superficie terrestre del país.
El objetivo es «avanzar en la protección de la increíble riqueza de la biodiversidad de las islas». En este sentido, Londres recordó que «poseen algunas de las más importantes y productivas zonas de desovado del Atlántico Sur» y que «son casa de siete especies de aves marinas amenazadas, entre ellas el albatros errante». El subsecretario de Estado de Reino Unido, Henry Bellingham, apuntó que esta declaración evidencia el compromiso del país con la conservación y protección de la biodiversidad de sus Territorios de Ultramar, así como su «eficaz» gestión ambiental.
Greenpeace ha aplaudido la decisión de Reino Unido, al considerar que la vida marina en las aguas que rodean a estas islas tiene una «importancia mundial», al tiempo que ha instado a alcanzar un acuerdo para la protección del Atlántico Sur. No obstante la declaración sobre Georgias del Sur y Sándwich del Sur podría contribuir a agravar la relación de Reino Unido con Argentina, que reclama la soberanía de estas islas y la de Malvinas desde que el país europeo se las anexionó, en 1833.
La consejera política de Greenpeace en Reino Unido, Ruth Davis, subrayó, en declaraciones a los medios de comunicación, que «la creación de reservas marinas debe ser un paso hacia la paz, no hacia el conflicto».