Dirigentes de siete países centroafricanos, reunidos en Brazzaville, capital de la República del Congo, han firmado un histórico tratado para establecer asociaciones con el objetivo de salvar la selva de la Cuenca del Congo, la mayor selva tropical del mundo después de la Amazonia.
Este acuerdo fue suscrito el sábado tras concluir una cumbre de dos días de líderes centroafricanos, reunidos en la ex colonia francesa para discutir la suerte de una región de 200.000 hectáreas en el corazón de África. En esta cumbre estuvo presente el presidente francés, Jacques Chirac, que realiza una breve gira por el Congo y Senegal.
«Estamos reunidos aquí para asegurar la preservación de una herencia preciosa, la mayor riqueza de la Cuenca del Congo, la selva», afirmó Chirac en la sede del Parlamento congoleño en Brazzaville. «La protección de estos bosques no puede esperar», agregó.
La selva de la Cuenca del Congo se extiende por 10 países y alberga a más de la mitad de las especies animales africanas, incluyendo toda la población de gorilas de la llanura. Cerca de 20 millones de personas dependen de este enclave para su sustento y cobijo. Pero la tala y la cacería ilegal y el tráfico de marfil han estado destruyendo la selva a un ritmo alarmante.
El acuerdo fue suscrito por los líderes de la República del Congo, Gabón, Sao Tome, Guinea Ecuatorial, Congo, Chad y la República Centroafricana.