El callejón de los tornados. No es el nombre de una película, sino de una zona en EE.UU. donde ocurren estos fenómenos naturales en mayor cantidad y violencia. Así se ha comprobado en la ciudad de Joplin (Missouri) o en diversas zonas de Oklahoma y Kansas, con cientos de muertos y desaparecidos. Los tornados suceden en todo el mundo y España no es una excepción, si bien no son tan devastadores como en EE.UU. Todavía podrían registrarse más tornados, porque la temporada se extiende de marzo a agosto.
Tornados en Estados Unidos y en España
La temporada de tornados de este año en EE.UU. es de las más graves que se recuerdan en las últimas décadas, con cientos de muertos y desaparecidos y cuantiosos daños materiales. Este país es muy sensible a este fenómeno natural y, en especial, el «callejón de los tornados», una franja comprendida entre las Montañas Rocosas y los Montes Apalaches (desde Dakota del Norte hasta Texas).
Los tornados se registran en todo el mundo. En España no son excepcionales, ya que se desarrollan entre quince y veinte al año, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Las áreas más propicias son el litoral mediterráneo y el archipiélago Balear (en especial Mallorca). No obstante, Jorge Olcina, climatólogo de la Universidad de Alicante y experto en desastres naturales, asegura que en España no se detectan tornados de tanta magnitud como los registrados en EE.UU.
Nunca se ha sobrepasado la intensidad F3 de la escala Fujita-Pearson, que mide la velocidad de los vientos ocasionados por los tornados en siete grados (de F0 a F6, el más extremo). El F3 supone una velocidad del viento de entre 250 y 320 km/h y daños graves: los árboles pueden arrancarse de raíz y paredes y tejados de edificios sólidos se desplazan con total facilidad.
Para conocer más sobre los tornados en España, son interesantes la web Tiempo Severo, desarrollada por un grupo de aficionados a la meteorología, o la de Caza Tornados.
Cómo y cuándo se producen los tornados
En España se registran entre quince y veinte tornados al añoLos tornados se producen en conexión con una fuerte tormenta sobre zonas continentales muy calientes. La lluvia asociada a la tormenta se evapora, enfría la atmósfera y ocasiona un contraste de temperatura muy marcado con zonas cercanas sin precipitación. Esta disparidad de temperaturas se traduce en una diferencia muy marcada de presión en una distancia pequeña y da lugar a vientos muy intensos.
Olcina explica que los tornados se forman en nubes de desarrollo vertical (cumulonimbos) muy grandes, llamadas «supercélulas». En su interior se generan sectores donde el viento gira a gran velocidad y causa unas «trompas» que descienden hasta el suelo. Por lo general, los tornados no duran más de veinte minutos, pero pueden tocar tierra varias veces en diferentes áreas. Su radio típico es de entre diez y veinte kilómetros y puede ser casi invisible, marcado solo por los escombros que arrastra. El viento puede llegar hasta los 520 km/h en los casos más extremos.
De igual modo, hay que distinguir entre «tromba marina», cuando ocurre en mar y no llega a tierra (más frecuentes en España, sobre todo en el Mediterráneo) y «tornado», que afecta a espacio terrestre.
La temporada de tornados se extiende de marzo a agosto. Son más frecuentes por las tardes y noches. No obstante, pueden registrarse en cualquier época del año.
Cómo protegerse de un tornado
En el caso de un tornado, se cuenta con muy poco tiempo para reaccionar. Por ello, tener un plan de actuación por adelantado y una respuesta rápida son las claves para protegerse de ellos. Las lesiones o muertes relacionadas con los tornados ocurren con mayor frecuencia cuando los edificios se derrumban, los objetos voladores golpean a la gente o cuando las personas se quedan atrapadas al tratar de escapar. Si no se ha conseguido salir de la zona azotada por un tornado, la mejor protección es, a menudo, un cuarto interior en el nivel más bajo de un edificio. La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) del Gobierno de EE.UU. aporta más consejos en su web en español.