La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, con el asesoramiento científico de la Universidad de Sevilla, ha concluido con éxito los primeros traslados de ejemplares adultos de una especie de caracol en peligro de extinción (Orculella bulgarica) efectuadas este verano, y cuyos resultados muestran un índice de supervivencia superior al 95%. Han sido tres las poblaciones trasladadas, dos de ellas en el Parque Natural de Huétor, donde se han introducido 140 individuos. El tercer traslado se ha llevado a cabo cerca del Parque Natural de Sierra Nevada, con un número de 120 ejemplares. Ambas localizaciones se sitúan en la provincia de Granada. Estas tres poblaciones se suman a las seis únicas conocidas en la actualidad, señaló la Consejería en un comunicado.
Estas actuaciones se enmarcan dentro del Programa de actuaciones para la Conservación y Uso Sostenible de los Caracoles terrestres de Andalucía, desarrollado por la Consejería de Medio Ambiente con el asesoramiento científico de la Universidad de Sevilla y cofinanciado por la Unión Europea mediante un FEADER.
La escasez de poblaciones de Orculella bulgarica, su aislamiento y el riesgo de destrucción son las causas del actual estado de conservación. De las 11 únicas poblaciones que han llegado a identificarse a nivel mundial, todas en Granada, se han perdido en los últimos años cinco de ellas. Los buenos resultados de esta medida «de marcado carácter experimental y pionera en este grupo faunístico» busca un aumento en el número de poblaciones de esta especie en peligro crítico de extinción, y por consiguiente, disminuir la categoría de amenaza.
La Orculella bulgarica, especie de caracol que se creía extinguida en el mundo, mide un solo centímetro de longitud y precisa de zonas húmedas, incluso encharcadas y poco transformadas por la mano del hombre para sobrevivir. Se alimenta de hojarasca y materia orgánica en descomposición, es hermafrodita y se reproduce en primavera.