Investigadores de la Universidad estadounidense de Carolina del Norte han descubierto, a través de un estudio publicado en «Nature», que las tortugas marinas se orientan mediante un «mapa magnético» de la Tierra, que actúa de manera parecida al sistema de localización por satélite GPS, que les permite navegar miles de kilómetros en el océano.
El estudio refleja que las tortugas marinas pueden ubicarse con respecto a su «hogar» porque interpretan las variaciones en el campo magnético de la Tierra, lo cual explica cómo estos animales se manejan con absoluta precisión en sus viajes por el Atlántico y retornan cada año al mismo sitio en busca de comida. Es un método similar al sistema GPS, solo que en vez de localizar su situación vía satélite lo hacen en función del magnetismo terrestre.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores realizaron un experimento con tortugas verdes recién nacidas de Florida. Las sumergieron en un tanque lleno de agua cerca de la costa sureste de Estados Unidos, en el que metieron un muelle gigante para simular los campos magnéticos que se encuentran en esa zona. Las tortugas que se expusieron a un campo magnético que simulaba uno que se encuentra a 337 kilómetros al norte del lugar del experimento, se dirigieron al sur, y las que se expusieron a otro campo magnético equivalente a uno a 337 kilómetros al sur, al norte.
Asimismo uno de los científicos que han llevado a cabo el estudio y su esposa, la bióloga Catherine Lohmann, descubrieron el año pasado que las langostas tienen un mapa similar basado en el magnetismo.