Un equipo internacional de científicos del programa «Censo de la Vida Marina» ha logrado desvelar, tras una década de trabajo, los secretos de la migración del atún azul, una especie que ve peligrar su supervivencia si continúa el actual ritmo de pesca.
Para averiguar el patrón que sigue la migración del atún azul, los científicos marcaron a más de un millar de ejemplares. Tras diez años de seguimiento, han concluido que dos especies diferentes de este pez comparten los mismos caladeros en el Atlántico antes de tomar, cada una, direcciones opuestas en su búsqueda de alimento.
El estudio también muestra cómo varían las poblaciones de atún azul. En este sentido, advierte de un preocupante descenso en el número de ejemplares en el Atlántico Norte, donde esta especie siempre ha sido muy numerosa. Según los investigadores, si se mantienen los niveles actuales de pesca, este pez podría desaparecer durante las próximas décadas.
El atún azul es un animal especial. Es uno de los peces más grandes del océano -alcanzan los 700 kilos-, poseen un metabolismo caliente y pueden vivir hasta 25 años. En los mercados japoneses, por algunos ejemplares se han llegado a pagar 100.000 dólares.