El Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, a través del Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil (Fitsa), ha puesto en marcha la plataforma SITVE para gestionar de una forma «rápida y eficaz» el pago de las ayudas a la adquisición de vehículos eléctricos nuevos. Industria ha asegurado que desde su apertura, el 4 de julio, el registro de los agentes de ventas «se realiza con total normalidad». Las ayudas alcanzan los 72 millones de euros y podrán subvencionar hasta el 25% del precio de venta del vehículo, antes de impuestos.
La solicitud de la ayuda se gestiona a través de los agentes de ventas que de forma voluntaria decidan adherirse al plan de ayudas. Estos agentes realizan las actividades que se determinen en el convenio que cada uno de ellos suscriba con la Fundación FITSA en el que se especificarán las condiciones para el registro de las solicitudes en la plataforma de gestión SITVE. El beneficiario final será quien recibirá la cuantía de las ayudas, aunque para ello «deberá contar con la colaboración del agente de ventas que es quién realizará las gestiones oportunas para la petición de la subvención», señaló Industria.
El SITVE es una plataforma de gestión única concebida para la gestión de las ayudas del vehículo eléctrico. A través de esta plataforma, tanto el beneficiario final como el agente de ventas estarán en todo momento informados de los trámites de su solicitud de ayuda. El SITVE «está totalmente automatizado, es seguro y evita el papeleo», destacó el departamento dirigido por Miguel Sebastián.
El presupuesto total destinado a las ayudas para este ejercicio es de 72 millones de euros. Las subvenciones pueden alcanzar un 25% del precio de venta, antes de impuestos, con un máximo de 6.000 euros por turismo, furgoneta pequeña, motocicleta y cuadriciclo enchufable a la red eléctrica. La cuantía máxima de la subvención varía en función de la autonomía eléctrica del vehículo. También se subvencionará el 25% del precio de adquisición bruto de otros vehículos eléctricos como autobuses, autocares o furgonetas grandes con un máximo de 15.000 o 30.000 euros.
Los principales objetivos de estas ayudas son impulsar la presencia en el parque de automoción de vehículos que utilicen la energía eléctrica de la red para desplazarse, así como fomentar la industrialización y comercialización de vehículos eléctricos.
En el caso de la adquisición de varios vehículos, el apoyo aumenta a medida que un mismo beneficiario adquiere más unidades, «con lo que se impulsa la adquisición de vehículos eléctricos por las flotas», destacó Industria.
Las ayudas incluyen todo tipo de beneficiarios, ya que se apoyan tanto las compras privadas como las realizadas por instituciones, administraciones o agentes públicos. Como novedad, frente a planes anteriores, las subvenciones las recibe directamente el beneficiario final, el comprador, en su cuenta corriente.