La factoría de Mercedes Benz en Vitoria ha reanudado hoy el trabajo en las cadenas de montaje de las furgonetas «Vito» y los monovolúmenes «Viano» tras 12 días de interrupción. Un defecto en una pieza suministrada por la multinacional Bosch -una junta en la bomba de inyección a alta presión para los motores diesel- obligó a paralizar la producción desde el pasado 27 de enero.
Los problemas no han afectado sólo a la planta de Vitoria -donde se han dejado de fabricar casi 6.000 vehículos- sino también a las alemanas de Bremen y Sindelfingen, además de a otras compañías automovilísticas como BMW, Volkswagen o Toyota.
Bosch reanudó hace unos días la fabricación en serie de las piezas problemáticas, tras subsanar las dificultades. Una portavoz de la fábrica vasca explicó que reciben desde la pasada semana las nuevas bombas pero han querido hacer «suficiente acopio» para reanudar la producción con «plenas garantías».
La normalización del ritmo laboral afecta a unos 2.500 de los casi 4.000 trabajadores de la planta de Ali Gobeo, que han dejado de trabajar estos días. Los operarios afectados recuperarán las 12 jornadas perdidas a lo largo del año.