En plena crisis, pocos son los que pueden pasar sin «apretarse el cinturón» ni recortar gastos en algunos ámbitos. Sin embargo, hay ciertos artículos en los que no se debe escatimar ya que son indispensables para la vida cotidiana; entre ellos, los neumáticos de un coche, sin lugar a dudas un elemento clave para cualquier ciudadano que dependa de este medio de automoción para desplazarse a diario. Aunque en principio puede parecer que en las ruedas de un coche no se puede recortar presupuesto -ya que los precios son los que son, y no hay mucho margen de acción-, los neumáticos de ocasión o los seminuevos son, no obstante, una de las mejores oportunidades para ahorrar sin renunciar a la seguridad y comodidad.
¿De marca o genéricos?
Los precios de los neumáticos están cifrados en función de distintas variables, que podrían resumirse en tres grandes categorías:
- Las dimensiones: el usuario está sujeto a respetar las dimensiones que el fabricante recomienda para el automóvil. En caso de no hacerlo, puede verse expuesto a riesgos indeseados.
- La casa fabricante del coche: la firma del coche que se haya adquirido determina el precio de los repuestos y reparaciones. Por lo tanto, los dueños de vehículos de gama más alta son los que verán más afectado su bolsillo a la hora de tener que adquirir los neumáticos, siempre que sigan las recomendaciones del fabricante al pie de la letra y adquieran la marca de neumáticos preescrita por él.
- La marca del producto: aquí es donde el consumidor tiene mayor margen de acción ya que, si bien las dimensiones deben ser respetadas, se puede elegir entre adquirir neumáticos de la marca que el fabricante del coche recomienda o bien optar por adquirir ruedas de firmas menos conocidas pero que prestan una fiabilidad igual a la de las grandes firmas. Esta opción supone un ahorro considerable.
Si, a pesar de todo, se prefiere ser fiel a una marca, se puede renunciar a que los neumáticos sean de primera mano, con lo que las alternativas aumentan, al mismo tiempo que el precio disminuye. Así, por ejemplo, se puede ahorrar entre 300 euros y 400 euros, en un vehículo de gama alta (como Audi, Mercedes o BMW); si se cambian las ruedas de un utilitario de gama media, pueden encontrarse neumáticos de segunda mano desde 50 euros por rueda -si son de una marca poco conocida-, y a partir de 90 euros si son de grandes firmas de neumáticos.
¿Dónde comprarlos?
La elección del lugar de compra de los neumáticos es una decisión que genera muchas dudas, puesto que prima ante todo la fiabilidad. La oferta es muy amplia, y en el mercado cibernético existen multitud de páginas donde se compran y venden estos productos, como neumaticos-online.es, neumaticosmasbaratos.com, o Rueda Plus. Todos ellos están especializados en neumáticos -en algunos casos aún con el 80% de vida útil-o productos para el automóvil, aunque hasta la fecha, los usuarios prefieren comprar en los talleres a los que acuden de manera habitual, por miedo a sufrir una estafa. Las casas de alquiler de coches, o los concesionarios de ocasión son también un buen escenario al que acudir en caso de querer adquirir neumáticos seminuevos.
La web, casas de alquiler de coches, talleres o concesionarios de ocasión son los principales puntos de venta
Las tiendas de los grandes fabricantes de ruedas son los lugares ideales donde adquirir neumáticos de ocasión, pero en ellas no es fácil encontrarlos de segunda mano, puesto que no suele ser un producto que los consumidores busquen en este tipo de establecimiento.
En cuanto a su instalación, hay que colocar sobre el mismo eje los neumáticos que presentan el mismo dibujo en la superficie de sujeción. Si se sustituyen sólo dos de los neumáticos, los nuevos tendrán que colocarse siempre en el eje delantero del coche, que es el que soporta todo el peso del vehículo y sobre el que ejerce la presión del motor. Además, este eje es también el que recibe un mayor desgaste en la frenada. Conviene, no obstante, recurrir a un profesional cuya opinión, además, podrá servir de respaldo para saber si los neumáticos se encuentran en buen estado o si por el contrario tendremos que volver a hacer un desembolso en poco tiempo.
La colocación de neumáticos nuevos puede tener un coste estimado de unos 20 euros por rueda, aunque el precio cambia drásticamente en función del taller al que se acuda, el tipo de coche que se tenga y, sobre todo, la ciudad en que se haga la operación.
Neumáticos seguros
La seguridad de un automóvil reside, en gran medida, en la calidad de sus neumáticos. Estos son grandes indicadores del estado de otros componentes del automóvil, imprescindibles para un buen funcionamiento de la máquina. Así, gracias al desgaste de los mismos se puede saber si el eje de las ruedas está bien ajustado, o si los frenos responden favorablemente. Por lo tanto, aunque se puede ahorrar una parte nada despreciable del presupuesto dedicado a las ruedas optando por vías alternativas, siempre hay que comprobar que el neumático cumple con los requisitos mínimos de seguridad. Según la Dirección General de Tráfico, los principales puntos que se deben estudiar al detalle a la hora de adquirir neumáticos seminuevos son:
- Que cumpla con las características y dimensiones recomendadas por el fabricante del vehículo.
- El dibujo de las ruedas en la banda de rodamiento debe tener como mínimo una profundidad de 1,6 milímetros. Este punto es crucial, sobre todo a la hora de enfrentarse a superficies mojadas, pues en función de lo profundo del dibujo la rueda tendrá más capacidad para adherirse a la superficie y evitar que el conductor pueda perder el control. La mayoría de modelos presenta lo que se denomina «indicador de desgaste», y gracias a este elemento se puede saber si el dibujo ha alcanzo la profundidad mínima de desgaste.
- Comprobar que la superficie no deja a la vista ampollas, deformaciones, grietas o cables sueltos.
- Cerciorarse de que el neumático aguanta la presión de aire recomendada para el vehículo, que no sufre perdidas o varía drásticamente su presión en función de las condiciones atmosféricas a las que se vea sometida la vía por la que se circula.
Si para ahorrar en la compra de las ruedas el usuario decide acogerse a las promociones de neumáticos de ocasión -que se realizan en las tiendas de las principales marcas fabricantes del sector-, también ha de comprobar que el producto que adquirido reúne las condiciones mínimas de seguridad y reglamentación.
Para que los neumáticos rindan al máximo es preciso tomar una serie de medidas para garantizar su conservación y mantenimiento, lo que alargará su vida y, por ende, permitirá ahorrarse el desembolso de una elevada suma de dinero de manera periódica. Los principales fabricantes de neumáticos como Bridgestone, Michelin y Pirelli dan pautas para asegurar la correcta conservación de los neumáticos:
- Si no se van a utilizar durante un largo período de tiempo, pueden guardarse en el garaje, para lo que hay que contar con un local donde los neumáticos no sufran la acción directa de los rayos del sol, que a largo plazo pueden resultar abrasivos para el caucho. También es conveniente resguardarlos de la lluvia o la nieve, puesto que pueden deteriorarlos.
- El lugar elegido para guardar un neumático deberá estar aislado de la presencia de sustancias químicas que puedan dañar la superficie del neumático, así como permanecer alejado de maderas u objetos metálicos puntiagudos que terminen perforando la superficie del material.
- Si se adquieren neumáticos que se van a utilizar mucho tiempo después, y se mantienen desinflados, hay que evitar colocarlos bajo objetos pesados, ya que el peso puede afectar a la forma del caucho y provocar que en el momento de utilizarlos estén completamente inservibles.