La compañía automovilista BMW ha sacado al mercado el primer coche que funciona con hidrógeno. Solamente ha lanzado 100 unidades que alquilará a una serie de clientes para que den a conocer la nueva tecnología de propulsión basada en el hidrógeno.
BMW Hydrogen 7 utiliza un motor tradicional de 260 caballos que puede ser alimentado indistintamente por gasolina e hidrógeno. Tiene una autonomía de 200 kilómetros con este combustible ecológico, que es cargado y se mantiene en el depósito a una temperatura de 253 grados bajo cero, y 500 más con gasolina.
La salida a la venta de este «eco-vehículo» ha llevado a calcular lo que costaría adaptar las alrededor de 8.000 gasolineras que hay en España para que pudieran suministrar hidrógeno. Extrapolando los cálculos realizados por BMW para Alemania -100.000 millones de euros sería el coste aproximado para adaptar las 16.000 gasolineras de la red alemana- en nuestro país la adaptación saldría por unos 50.000 millones de euros.
En España ya hay algunas estaciones de servicio que suministran hidrógeno, pero exclusivamente a vehículos de transporte público que participan en proyectos piloto de propulsiones eléctricas alimentadas por pilas de combustible que generan energía a partir del hidrógeno.